Calle Ancha

Alberto Ramos / Santana

Es fácil dedicarse a la política

Es fácil dedicarse a la política, al menos en Cádiz. Todo consiste en poner cara seria, de circunstancias, de póker, y decir, "y tú más". Y si esa fórmula no funciona, que habitualmente funciona, decir "con los míos la cosa -da igual qué cosa- iba mejor, éstos -los contrarios, y por tanto, los malos- lo han estropeado para fastidiar a los ciudadanos -en nuestro caso, a los gaditanos". Para tener éxito, junto a esa capacidad de hablar como las esfinges, hay que contar con una afición entregada, o agradecida, y un importante bloque de votantes amnésicos, de manera que no haya espíritus críticos que cuestionen los mensajes. Y aunque de muestra vale un botón, como en Cádiz somos el no va más, para demostrarlo no sólo un botón, ahí está el zurcido que nos ofreció la semana pasada el gobierno municipal, cuando calificaron la visita que los ministros de Interior y Fomento, junto con el Consejero de Trabajo, realizaron a Cádiz como "pura comedia".

Hay que entenderlos. Durante la pasada legislatura los portavoces del Partido Popular, con Teófila Martínez a la cabeza, han tratado de convencernos de que el gobierno socialista tenía abandonada la ciudad porque los ministros no venían a Cádiz. Y, como ejemplo contrario, recordaban las visitas de ese ministro que inauguraba dos veces la misma rotonda, y tres veces un kilómetro y medio de autovía. Pero si dos ministros y un consejero, socialistas, vienen a Cádiz, y no se hacen fotos aparentes inaugurando fuegos fatuos, Teófila Martínez acusa a los ministros de "faltar al respeto a los gaditanos viniendo a la provincia para engañarles y volver a tomarles el pelo". Más lejos aún, afirma que la ministra de Fomento se burla de los gaditanos cuando anuncia que el segundo puente estará listo en el año 2012. Y, confiando en la amnesia colectiva de los gaditanos, dice sin ruborizarse que el nuevo puente tendría que estar terminado el año 2008 según las previsiones del Gobierno de Aznar, olvidando -o sin olvidar, pero disimulando- que ella misma, haciéndose eco de lo que dijo José María Aznar, anunció en 1997 que el segundo puente se inauguraría en el año 2002.

Y mientras tanto, dando ejemplo de lo que es la política de la amnesia colectiva, del adormecimiento de la ciudadanía, del aburrimiento de lo incómodo, desde hace años en el ayuntamiento se aplica la política del silencio administrativo como modelo de gestión. Da igual que los requerimientos y las preguntas de la ciudadanía se hagan mediante el registro oficial: no existen. Es el caso de "inexistentes" obras como las de la calle Ruiz de Bustamante, o las rampas del Patio de la Alegría. Cuando algo incomoda, no se menciona, pues lo que a Dios (Teo) no le es beneficioso, rentable, ni existe, ni debería existir.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios