Un centenar de establecimientos y comercios -entre ellos, entidades bancarias, detallistas de los mercados y taxistas- secundó ayer el paro de dos horas convocado por la asociación de empresarios Emproa para protestar contra las inminentes obras del tranvía que atravesará la calle Real y, sobre todo, por la falta de información que acompaña a esta importante actuación. La protesta, que no contó con el apoyo de la Asociación de Comerciantes de San Fernando (Acosafe), puso de manifiesto la incertidumbre, la inseguridad y los recelos que el sector mantiene hacia un proyecto que les afectará directamente, sobre todo durante los 18 meses que se prevé que durarán las obras en la calle Real. Emproa calificó de "rotundo éxito" el seguimiento del paro convocado, la primera medida de presión que ponen en marcha.