EL ser humano ha creado un conjunto de símbolos de carácter internacional, que se pueden entender en cualquier país sin que se conozca el idioma del lugar. Es el caso, por ejemplo, de las señales de tráfico.

Algunos de estos símbolos tienen los colores amarillo o azul. En el mismo ejemplo, una línea amarilla pintada en el borde de la acera significa que no se puede parar el coche. Es lo que pasa con el Cádiz, que no puede parar de ganar puntos hasta lograr el ascenso. Si la línea es azul, estamos en zona azul y significa que hay que pagar. Es lo que hace el Cádiz con sus trabajadores y proveedores, porque el que paga descansa y el que cobra descansa más, y estando descansaítos se rinde mejor a la hora del partido.

Pero lo importante es que se han tomado los colores amarillo y azul como principales en las campañas de reciclado. Amarillo para plásticos y envases, y azul para los papeles. La mezcla de ambos colores, el verde, se reserva para el vidrio.

Es curioso ver que en el mundo se ha enarbolado la bandera del cadismo para hacer frente a uno de los principales problemas de la humanidad: el problema ambiental, y se emplean nuestros colores para combatir el calentamiento global, el deshielo de los polos y el avance de la desertización.

Pero no es de extrañar, porque el ser humano es, por su propia naturaleza, cadista; y el cadismo puede estar luchando a la vez contra el cambio climático y contra el Sevilla Atlético. No importa. Juntos ganaremos todas las batallas y venceremos a todos los rivalesý y a Primera División.

Que se cumpla este deseo, y un Feliz Año Nuevo Cadista para ustedes y sus familias (que incluye a los seres queridos, sin los que no es posible la felicidad).