Polémica Cinco euros al turismo por entrar en Venecia: una tasa muy alejada de la situación actual en Cádiz

LÍNEA DE FONDO

J.M. Sánchez Reyes / Jmsanchezr@diariodecadiz.com

Salvemos al Cádiz

La afición, una vez más, debe demostrar el domingo que es lo único de Primera que tiene la SAD

EL más que saludable ejercicio de cadismo llevado a cabo por un grupo de hinchas el pasado lunes exigiendo compromiso a los jugadores debe ser el acicate definitivo para que la afición -una vez más- demuestre el domingo que es lo único de Primera que tiene la SAD (qué mal rollo llamar así al CLUB de nuestros amores). Ese día hay que ir a animar al CÁDIZ con mayúsculas que se nos desangra. Al de las grandes gestas. Al de Mágico y Pepe Mejías. Al de Oli. Al de Kiko y Dertycia. Al de Carvallo y Mané. El de la promoción contra el Málaga. El de Milosevic -¿para cuándo ese homenaje?- o el del IV Grupo. El de Orúe pleno de casta. Ese Cádiz que nos han arrebatado en los últimos años. El Cádiz de siempre. El pobre pero honrado. El nuestro, el que llevamos dentro. La institución casi centenaria tan bien acogida en toda España.

Toca de nuevo, desde la grada, intentar arreglar un desaguisado perpetrado por un grupo de futbolistas -no todos- que deshonran la camiseta que vistieran Chico Linares, Manolito o Juan José. Tres pilares del corazón cadista. El domingo en las gradas tiene que haber 20.000 Raúl López. No cabe otra que echarse al monte. El Cádiz está en peligro. Debe seguir siendo eterno por encima de quien esté en la presidencia o de quien esté paseándose sobre el césped. La afición debe empujar el domingo para que el final de la temporada no sea un calvario. Animando desde el principio. Ya habrá tiempo para ajustar cuentas con los que nos han llevado a esta situación.

Estamos ante uno de los partidos más importantes de los últimos tiempos. Demos la penúltima oportunidad a este hijo nuestro que se nos ha torcido. Porque todavía amamos a ese escudo que no es propiedad de nadie ni lo será nunca. Las empresas ¡nunca! podrán gestionar nuestros sentimientos. El domingo hay que animar los noventa minutos para salvar al Cádiz del pasado y el del futuro, aunque para eso haya que alentar a los que integran este patético presente.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios