EXISTE una leyenda urbana que dice que los chinos se sustituyen unos a otros. Que cuando uno con residencia legal en España muere, otro lo reemplaza. En ese tópico se movió el morbo de la que se llamó "trama china" de hace 10 años y lo mismo se puede decir del hombre de nacionalidad china que al parecer pretendía suplantar a un compatriota en un examen de conducir. Es otra leyenda urbana que un comando de la kale borroka sustituyó a conspicuos representantes del Ateneo días atrás en el pleno municipal que aprobó el convenio de plaza Sevilla por el cual se podrá tirar, en un futuro, el ya famoso edificio de la Aduana. Tenían que ser agitadores disfrazados porque gente de orden no irían a reventar un pleno con sus carteles como si esto fuera Donostia. Sólo cabe pensar en una suplantación de personalidad, máxime cuando no estaba el del sombrero y el comando ateneístico no puso una placa conmemorativa en las Casas Consistoriales. Otra leyenda urbana es que en la próxima Semana Santa unas cofradías irán por la carrera oficial en un sentido y otras en el otro. Tiene que ser mentira que haya cofradías que empiecen en San Antonio camino de la catedral y otras que hagan el recorrido inverso. Alguien ha debido suplantar la personalidad del Consejo de Cofradías o se ha corrido el bulo como si fuera el rayo verde de la Caleta. Son cosas tan insólitas que nadie puede creer. Porque uno piensa si una viene y otra va en medio de la calle Ancha ¿cuál tendrá preferencia? ¿tendrá que llegar el impar policía municipal y famoso cofrade Seisdedos a retirar un paso con la grúa? ¿cobraría el gran cofrade de la Piedad y Teniente de Alcalde de Hacienda, el defenestrado Pepe Blas, algún tipo de tasa o precio público? Otra leyenda urbana. Por si fueran pocas el Ateneo anuncia que va a bautizar al Consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía y Presidente del Consorcio del Bicentenario, Gaspar Zarrías. Yo veo al político de Jaén un poco talludito para convertirse a ninguna fe más allá de las que profesa a su tierra, a su partido y al Atlético de Madrid. Estoy seguro que no se va a dejar bautizar por el tío de la mascota. Y menos con una vasija de improbable contenido cuya metáfora se debe a José María Pemán. Otra leyenda urbana, no les quepa duda. Prueba de ello es que no se anuncia la colocación de una placa.