EN más de una ocasión lo hemos dicho. El Bicentenario es una cuestión de estado, nacional, con un escenario privilegiado para su conmemoración, San Fernando y Cádiz. Hacen bien el alcalde isleño y la alcaldesa gaditana en presentar ideas, avanzar actividades y realizarlas, reclamar proyectos e insistir en que los plazos corren. Pero el impulso definitivo para consolidar la celebración debía venir de más arriba. Y así se entendió desde el Gobierno español, y por eso se constituyó, en febrero de 2006, la "Comisión para la conmemoración del II Centenario de la Constitución de 1812", un órgano colegiado adscrito al Ministerio de la Presidencia, y presidido por la Vicepresidenta del gobierno, que es quien impulsa y coordina las actividades, contando siempre con las administraciones y entidades que quieran participar en la celebración. Y para que el trabajo sea eficaz y visible para los ciudadanos se constituyó un Consorcio que coordina el día a día y preside el Consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía. Sin este impulso final, que sirve para aglutinar las fuerzas que individualmente tienen otras administraciones, las conmemoraciones de 2010 y 2012 tendrían menos fortaleza. Por eso hay que aplaudir que, bajo la dirección del Gobierno español, y junto con los ayuntamientos de Cádiz y San Fernando, se hayan sumado con ganas de trabajar en el éxito del Bicentenario la Junta de Andalucía y la Diputación de Cádiz, a los que, sin dudas, se suman otros organismos públicos, especialmente la Universidad de Cádiz.

Los efectos se están notando ya. Hace unos días conocíamos la buena noticia de que la Junta y el Obispado de Cádiz habían logrado un acuerdo para la utilización del Oratorio de San Felipe en los actos de conmemoración, un acuerdo que no implica, pues nunca se consideró imprescindible, la desacralización del Oratorio. Además, la Junta apuesta por la creación de un centro de estudios sobre el constitucionalismo democrático que debe convertirse en un referente en su campo. La Diputación anuncia la creación de una oficina centrada en el Bicentenario que encauce la apuesta y los presupuestos que el ente provincial dedicará a las conmemoraciones. El Consorcio ha establecido convenios con la Asociación de la Prensa y con la Universidad de Cádiz, y desde la universidad, donde desde hace años investigadores y dirigentes están trabajando sobre el Bicentenario, están surgiendo ideas, muchas de la cuales asumen otros organismos para colaborar en su ejecución.

Este es el camino correcto, evitando protagonismos personales, pues como dijo ayer la Vicepresidenta del Gobierno, en los actos del Bicentenario el único protagonismo corresponde a los ciudadanos.