Autobuses a Sevilla

Establecido el sistema libre y universal de la gratuidad pública del bus, se puede aplicar en ambos sentidos

Los autobuses desde Cádiz a Sevilla son buenos o malos, según las circunstancias. No es lo mismo si ponen autobuses gratis para ver al Cádiz en el estadio Sánchez Pizjuán que si son autobuses gratis para que los cruceristas llegados al puerto se larguen a ver la Giralda. Según los casos, el buen gadita dice: "Está bien". O sentencia: "Está mal". Hemos elogiado los 80 autobuses para ir con el Cádiz CF a Sevilla. Pero ¿y si hubieran sido 80 autobuses de cruceristas pirados? Las protestas hubieran provocado alguna marea. O se diría que la culpa era de las terrazas de los hosteleros, que antes daba gloria verlas, pero ahora estorban.

Cuando el presidente del Cádiz, Manuel Vizcaíno, anunció que los abonados podrían ir en autobuses gratis a Sevilla, pagando sólo las entradas a cinco euros, mira como nadie lo ha llamado "el sevillano". Pues todo el mundo lo entendió: es una oportunidad para viajar gratis a Sevilla en autobús, sin adquirir el billete de ida y vuelta en los Comes. Sin embargo, desde hace años, se mira con malos ojos a los cruceristas que se largan en autobús. Para atraer a esos cruceros, en Sevilla han intentado dragar el río Guadalquivir, desde Bonanza a la Torre del Oro. Pero no coló. Siempre les quedará el autobús. Y no quejarse, que son como los cantes flamencos: de ida y vuelta.

Esta es una de las grandes enseñanzas que le debemos a los autobuses del Cádiz CF. Establecido el sistema libre y universal de la gratuidad pública del bus, se puede aplicar en ambos sentidos. Según los días y las fiestas. Por ejemplo, al revés, de allá para acá: autobuses gratis desde Sevilla para la Magna Mariana, para la playa Victoria y otras con banderas azules, para los Tosantos, para la Erizada y la Ostionada (con permiso de los erizos y los ostiones, que sufren lo suyo, y viven mejor sin esas animaladas), para el Carnaval sin fecha fija, incluso para los Jartibles… Para la Semana Santa se podrían poner (gratis, por supuesto) autobuses de ida y vuelta, que viajaran para allá en modo costal, y retornaran a paso de horquilla.

Los autobuses gratis tienen otra ventaja: no pagan el peaje en la autopista. Bueno, sí lo pagan, pero los beneficiarios sólo necesitan subirse. Y les da igual si lo suprimen un año antes o uno después, ya que a ellos les sale gratis de todas maneras. En resumen, se puede decir que lo importante es el Estado del Bienestar, y que así da gusto. Se nota claramente que somos una afición de Primera. A diferencia de los cruceristas americanos que confunden el fútbol con el rugby, y se van sin saber dónde está la Caleta.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios