Análisis

ana sofía pérez bustamante

La universidad y otras cosillas

A raíz de la sentencia contra "la manada" anda la opinión pública revuelta contra la judicatura, y los jueces están indignados por esta especie de linchamiento popular. Con el máster de Cifuentes la gente ha puesto el grito en el cielo. Pero yo, que estoy en una universidad pequeña y ancilar, sé de qué manera se han expedido licenciaturas y doctorados en la Transición y sobre todo después, en la era del PSOE.

La consigna era que había que habilitar clases políticas, y esas clases se inventaron con la cooperación de la Universidad. Eso fue así en los 80 y 90, y en el nuevo milenio sigue siendo igual. Sin la coartada del bien común, pero igual. Porque el bien común es el menos común de los bienes. Y se trafica con títulos y con influencias porque la Universidad es justo eso: una plataforma para que pueda ascender socialmente la gente particularmente lista que no tiene en origen influencia ni peculio.

La gente sencilla no se ha parado a pensar (porque no le afecta) que la Universidad es un gremio con tantos intereses como cualquier otro. Y estamos llenos de idealismos confusos y confundentes.

Tuve un alumno con el que no llegué a hacer carrera. Resultó que tenía una discapacidad mental y había entrado en el máster en el cupo reservado a discapacitados. De repente te encuentras con una persona que aspira a salir adelante, claro, sí, pero que no está preparada y además padece de esquizofrenia y te vuelve a ti medio loca. Cuando empiezas a indagar en cómo ha sido posible llegar a una situación tan incómoda todo son ignorancias y evasivas.

Resulta que en la UCA solo hay una persona encargada de todos los casos problemáticos en cuatro campus. Sobre el papel está bonito lo de la igualdad de oportunidades, pero en la vida real no es real: es un caos sin apoyo y sin financiación, es una agonía para el profesorado (que no está advertido y no tiene preparación) y para las personas seducidas por una perspectiva inviable, que decora los mejores sueños del humanismo a base de saltarse a la torera la racionalidad.

Bueno, lo que yo quería decir es que la Universidad es una institución tan respetada como poco conocida. Y cuando se la empieza a conocer no necesariamente gusta. Lo mismo exactamente que el Código Penal.

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