Viernes Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Viernes Santo en la Semana Santa de Cádiz 2024

Cuántas veces se escucha en Madrid aquella frase de "los andaluces siempre están tocando las palmas. Que si ahora el Carnaval, después la Semana Santa y luego la flor en la cabeza de feria en feria hasta verano".

Estereotipos caducos y manidos propios del que nunca ha cruzado Despeñaperros. Algunos aquí en la capital no saben que esos carnavaleros andaluces, tan vagos y despreocupados ellos, ensayan desde septiembre durante horas cada día. Que se pagan ese disfraz tan pintoresco con muchos kilómetros de actuaciones. Que sus días de Carnaval se los quitan de sus vacaciones.

Chirigoteros, comparsistas o coristas que cuando llega la fiesta a la calle cantan gratis de esquina en esquina, de tablao en tablao. Sí, esos que tocan las palmas lo hacen generosamente. Y tú, urbanita estresado de la gran ciudad, eres incapaz de ceder el paso en el metro o no atropellar a un peatón mientras cruza la calle. Normal que con tus prisas y tu ritmo egocéntrico no entiendas qué significa la satisfacción de dar sin recibir.

Intelectual cosmopolita que piensas que los andaluces siempre estamos de fiesta, tú que ignoras que detrás de esa careta se esconde el talento de un músico, un escritor, un poeta. Arte sonoro para la historia, hecho por el pueblo para el pueblo. La crítica social en forma de canción que navega por el mundo en forma de video de YouTube. Sí, ese mismo video que tú compartes a tus amigos por WhatsApp gracias a la generosidad de tanto vago andaluz.

Esos vagos subvencionados andaluces, que tienen la valentía de cantar lo que muchos no se atreven ni a pensar. Esos incultos andaluces que no leen libros son capaces de escribir un verso que el urbanita ni imagina. Literatura pura del Carnaval, el ingenio del doble sentido, al alcance de la inteligencia de pocos.

Pero la reconversión siempre llega al que reniega. Será que Cádiz da ganas de vivir más intensamente, de sonreír en vez de increpar. Será que en el fondo te envidian, andaluz vago y despreocupado. Por eso será que en Madrid triunfan las galas de Carnaval con los ganadores del Falla y los bares celebran su propia Feria de Abril con un sucedáneo de rebujito y un intento de lo que aquí llaman "flamenquito".

A más de un madrileño se le ve de vuelta en el AVE hablando maravillas de Cádiz. Cómo cambian las tornas cuando es uno mismo el que aprende a tocar las palmas. Por eso, cada vez son más los enamorados de nuestra tierra. Sigamos tocando las palmas.

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