Análisis

Jaime Rocha

Asia, el futuro

¿Cuáles son las bases del milagro económico de Singapur? ¿Cómo se convirtió en un país rico?

Erika, periodista de raza donde las haya, tiene una curiosidad casi enfermiza por todas las cosas y mi viaje al sudeste asiático le ofrece una magnífica oportunidad para conocer, aunque sea indirectamente, esa región del mundo a la que tiene intención de viajar próximamente.

-Me quedé con muchas preguntas en el tintero el otro día y estaba deseando seguir con el "interrogatorio" sobre tu viaje. Fue el saludo de Erika al contestar a su llamada.

-Lo estaba esperando. Dispara. -¿Cuáles son las bases del milagro económico de Singapur? ¿Cómo pasa de unas tasas de paro elevadas, de una bajísima renta y una situación económica desastrosa a estar hoy entre las más ricas del mundo?

-Cuando Singapur es expulsada de Malasia en 1965, el primer ministro Lee Kuan Yew, y su gobierno, del Partido de Acción Popular, toman algunas medidas drásticas: Eliminar la corrupción de forma radical, juzgando y condenando a muerte a los corruptos, implantando unas leyes muy duras, que incluyen el castigo físico o pena de muerte para tráfico de drogas, soborno, corrupción o terrorismo, que todavía perduran.

-¿No te parece una barbaridad, Jaime? -No te estoy dando mi opinión Erika, te informo solamente. -Sigue, por favor.

-Crean un "centro de negocios" para atraer a grandes empresas mundiales, dando unas facilidades fiscales de implantación y desarrollo de negocio sin competencia en el mundo entero. Hoy el "centro de negocios" de Marina Bay es el tercero del mundo, tras la City de Londres y Wall Street de Nueva York.

-¿Y son muchas las empresas extranjeras implantadas en Singapur?

-Todas, pero hay una tercera decisión importante. Se construye lo que es hoy el mayor puerto de contenedores del mundo. Estando yo allí, cifras oficiales daban 830 barcos atracados descargando (la descarga, automatizada al máximo, se hace en 40 minutos) y 1.070 fondeados esperando. Y para evitar las esperas están construyendo un nuevo puerto aún más grande y moderno.

-¿Es un régimen totalitario, como dicen?

-Y más, pero tengo que dejarte. Seguimos otro día. (Continuará).

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios