Viernes Santo Horarios, itinerarios y recorridos del Viernes Santo en la Semana Santa de Cádiz 2024

Rojo y negro

La tormenta y la vida

  • Renacimiento publica el poemario de María José Rico, un sentido intento de descifrar lo que es o puede ser la existencia

Qué inagotable y hondo es siempre Borges. Mi vida que no entiendo. Cualquiera pensaría que el título está inspirado en una pretenciosa película de Coixet, pero no: es parte de un verso de Borges. Siempre Borges. Cuarenta y tres poemas. Cortos, sencillos, directos, hondos. Decía Julián Marías que él había escrito libros pero que su mujer, Dolores Franco, había criado a cuatro hijos (o cinco, mejor dicho). Sí, de acuerdo, pero ¿quién, salvo los hijos, recuerdan hoy a la madre? Criar, crear. Este libro aúna rara, difícilmente ambos verbos.

Hay un haiku excelente hacia la mitad del libro, cuando el lector ya ha tomado el pulso de esta poeta (¿y por qué no recuperar el término poetisa?: va resultando ya más pedante decir "la" poeta que poetisa), cuando ya ha leído poemas como El adiós, La musa, Otra tarde o ¿Por qué me has despertado?. Dice el haiku: "Hay calma inquieta./ Estalla la tormenta:/ tranquila calma." Es tan complicado, y quien lo intentó lo sabe, resumir en menos versos, con menos sílabas, lo que es la vida, lo que es o puede ser una vida. El gran Mandelstam hablaba de la humedad de tierra que llevan en la sangre algunas mujeres. Este libro sabe, huele a eso: a tierra mojada tras la tormenta. Sólo una mujer y sólo una madre, María José Rico (Sevilla, 1962), podía haberlo escrito. Absténgase de leerlo quien no cumplió los treinta. Y bien cumplidos. Por cierto: el texto de la contraportada peca de modesto (o tal vez esa humildad que rezuma sea el nombre de la humedad de tierra que exuda el libro). La literatura no responde a criterios económicos (aunque muchos días lo parezca o aparente más) pero hay que medirla, como todo, por sus resultados, más que por sus intenciones o pretensiones. Hay más, mucho más, de lo que decaídamente anuncia su breve contraportada en este libro hondo, sencillo, machadiano, en el buen sentido (¿cabe a estas alturas otro?) de la palabra.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios