La Asociación de Gestores Culturales de Andalucía (GECA) "rechaza" la subida del IVA planteada por el Gobierno central para los bienes y servicios culturales, que repercutirá "negativamente" en la en la producción, distribución y exportación de bienes y actividades culturales, contribuyendo a la "destrucción" de empleo y al "empobrecimiento" cultural de nuestro país. La GECA se suma así al comunicado difundido por la Federación Estatal de Asociaciones de Gestores Culturales (Feagc), integrada por 21 organizaciones que representan a más de 4.000 profesionales, que ha mostrado su "preocupación" por los cambios anunciado.

Así, los profesionales reivindican el establecimiento de un IVA "unificado y superreducido" para el sector de la cultura, que "garantice la diversidad, estimule la participación y permita que el sector desarrolle todo su potencial, contribuyendo a la recuperación económica a corto y medio plazo". Además, los gestores culturales "no sólo muestran su rechazo" al aumento de los IVAS reducidos del 8 al 10%, también "denuncian" la propuesta de incrementar el IVA general del 18 al 21%, porque afecta al libro electrónico, y el hecho de incluir en este capítulo las entradas de espectáculos, cines, teatros, circos, conciertos, museos, exposiciones y la facturación de otros servicios culturales, lo que reducirá la disponibilidad de recursos de los ciudadanos, que limitarán aún más su presupuesto para cultura. Asimismo, los gestores culturales profesionales demandan que "se reconozca la rentabilidad social y educativa" del sector de la cultura, reclamando para España la excepción cultural que "proteja la diversidad, potencie la creación y estimule la participación de los ciudadanos en la vida cultural".

El presidente de la federación, el malagueño Rafael Burgos, también presidente de la GECA, considera que "el cultural nunca ha recibido un trato comparable al dado a otros sectores, pese a que atesora enormes posibilidades de generar empleo y dinamismo para otras áreas de actividad económica". Igualmente, en su comunicado, recuerdan que a la "preocupante" subida del IVA se une la anunciada reforma de la Administración Pública y la Ley de Bases de Régimen Local, que consideran "reducirá a la mínima expresión las competencias de las administraciones locales en materia de Cultura". Por último, los profesionales esperan que mientras que se aprueba el IVA cultural, "en ningún caso se aplique a lo largo de 2012 el incremento anunciado, puesto que la mayoría de las organizaciones culturales ya han publicado los precios correspondientes al período septiembre-diciembre", y por tanto "no pueden reaccionar ante tal incremento".

Por su parte, la Plataforma de Empresarios y Creadores del Audiovisual Andaluz (Pecaa) y la Asociación de Empresas de Producción Audiovisual y Productores Independientes de Andalucía (Aepaa-Apria) han califica de "escándalo" la subida del IVA planteada por el Gobierno central, que "debería poner soportes para asumir riesgos, y sube el IVA, lo que más bien parece una zancadilla".

El presidente de la Pecaa, José Antonio Hergueta, tacha de "sorprendente" que en un momento de dificultad de una industria "estratégica" se opte "por poner dificultades adicionales que básicamente van a suponer menor recaudación con el cierre de más cines y más productoras, algo que venía pasando". De hecho, añade, "el IVA que se recaudará ahí será suficientemente poco significativo para que se hubiera establecido otro método, e incluso al contrario, incentivos para una industria que genera mucho empleo y mucha riqueza".

El presidente de la Aepaa-Apria, Manuel Gómez Cardeña, considera que esta subida supone "una piedra más atada al lastre que ya soportamos", es decir, "se suma a las dificultades que hay con las televisiones, especialmente las públicas, a la dificultad de la Consejería de Cultura y Deporte, por la falta de presupuesto, y a los recortes que ha hecho el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, que son todos de un orden o superiores al 50%". De este modo, Gómez Cardeña lamenta que todo esto se esté trasladando al sector "en forma de cierre de empresas y de despidos", y que los pocos "que aún estaban aguantando se vean ahora con un nuevo obstáculo que desanima cualquier posibilidad de futuro", porque "si ya existían dificultades, esto viene a ahondarlas". "Si reduces más del 50 por ciento las ayudas; no hay operadores que puedan hacer frente a las responsabilidades que la Ley de Comunicación Audiovisual establece para inversión en cine; y encima multiplicas al doble el precio del IVA en las salas, parece que alguien está empeñado en cargarse el cine español", critica.