Cuando el artista cordobés Miguel Ángel Moreno veía de pequeño el concurso de agrupaciones carnavalescas del Teatro Falla ideó su propia perspectiva del paisaje urbano de Cádiz. Una ciudad que construyó en su mente a partir de los propios forillos con los que las agrupaciones se presentaban ante su gran público.

Cuando pisó la ciudad por primera vez en 2004 pudo comprobar que no iba descaminado, ubicando aquellas localizaciones que había codificado a través de estos telones.

De aquí parte Paisajes en retaguardia, que es el resultado de la investigación que ha llevado a cabo en el seno de su residencia en espacio cultural Línea de Costa, en el ECCO, donde ayer inauguró esta muestra.

Durante la estancia que tuvo lugar en la segunda quincena de septiembre, trabajó en "la construcción de estos paisajes olvidados, en la búsqueda metafórica de paisajes efímeros, haciendo un análisis de la imagen paisajística de Cádiz a través de estas vistas pintadas como telones de fondo de la historia reciente del Concurso de Agrupaciones", explican desde la organización.

Para ello se ha nutrido de la labor de los auténticos protagonistas de estas historias narradas en imágenes, de los artesanos y las empresas de escenografía vinculados con el Carnaval de Cádiz. Una labor que Miguel Ángel Moreno ha querido homenajear con una exhibición articulada en tres tiempos. Por una parte, el Pasado, con las figuras de Manolo Peinado y Manolo Torres al frente, imprescindibles para conocer los inicios de la escenografía y el diseño del vestuario en nuestra época. El Presente, que presenta de la mano de Artifex a través de Manuel Sánchez, responsable de esta empresa, y Futuro, que representa con RAS, como representantes de una industria que amplía sus objetivos, como claro ejemplo de emprendimiento y desarrollo.

Un forillo original ahora descontextualizado preside el espacio, que toma la nave 12 del ECCO. Una pieza que se acompaña a su vez de tres piezas de vídeos, una entrevista-presentación de los artesanos, retratos de los mismos y un postalero con estampas que ilustran los rincones más pintorescos de la ciudad.

Durante el proceso del trabajo su autor explicó que "como un neo-romántico buscaré entre las ruinas del abandono dónde y cuál es el estado actual de estas telas. Como el restaurador del Museo de Orsay me propongo ir recopilando información histórica y sobre todo vinculada a estos paisajes que se convierten para mí en postales o grabados románticos, trasladando a la campiña cordobesa todo un paisaje y una cultura con la que tengo la suerte de trabajar"

Miguel Ángel Moreno Carretero es licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla y ha sido galardonado con premios como el Pepe Espaliú, el Desencaja, la Beca de Artes Nobles o el Premio de arte Joven de la Junta de Andalucía. Ha sido residente en la tercera promoción de la Fundación Antonio Gala y ha obtenido en dos ocasiones la Beca de la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí y Fundación Rodríguez Acosta. Su obra ha participado en ferias como MACO (México), Art Beliege (Bélgica), Just Madrid y Art Madrid; y ha expuesto en centros de arte como Matadero (Madrid), CAAC Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (Sevilla), CAC (Málaga), Casa Góngora (Córdoba), Capela de Santa María (Lugo), Torres Hejduk (Santiago de Compostela), así como su reciente exposición en La Fábrica (Madrid) y la inminente retrospectiva organizada por la Diputación de Huesca. Su obra forma parte de las colecciones de las diputaciones de Córdoba y Burgos, del CDAN de Huesca y del Museo de Jaén.