Los trabajos arqueológicos puestos en marcha el pasado mes de agosto en el solar de la calle García Carrera -terrenos de Abárzuza- donde el Ayuntamiento de Cádiz tiene previsto construir dos bloques de viviendas de protección oficial, han dejado al descubierto restos de gran interés para el conocimiento de la necrópolis antigua de Cádiz.

Así lo confirmaba ayer el arqueólogo de Procasa, Francisco José Blanco, encargado de los trabajos de excavación preventiva. Según explicaba el experto, se han localizado en esta parcela tres enterramientos romanos, dos incineraciones realizadas en fosa simple y una inhumación también en fosa simple. Esta última responde al esqueleto de una mujer de entre 40 y 50 años.

Por otra parte, también se ha encontrado una estructura funeraria rectangular realizada con sillarejo y piedra caliza, cuya finalidad está aún por determinar. Parece ser que en los extremos de la estructura -en mal estado de conservación- había escalones y una gran piedra central simétrica al eje de la misma.

Junto a ella han aparecido dos ánforas con restos en el interior como ceniza, una jarra de cerámica y restos óseos de un animal calcinado, en la primera. Y en la segunda, diversos recipientes cerámicos tipo cuencos, tapadera, platos y una jarra. Asimismo, uno de los platos contiene restos óseos alimenticios también por documentar.

Según informa Francisco José Blanco, cuyos trabajos ha llevado a cabo bajo la supervisión de la Delegación Provincial de Cultura de la Junta, parece indicar que se trata de ofrendas alimenticias correspondientes a un ritual funerario.

Otro de los hallazgos más significativos en el solar ha sido la aparición de ánforas alineadas y seccionadas de diversa tipología, que servían para delimitar un sector de la necrópolis romana.

Tanto la estructura como las ánforas rituales son de época romana republicana - siglos II y I a. C.

Estos hallazgos en esta parcela de los terrenos de Abárzuza desprenden nuevos datos de la antigua necrópolis de Cádiz, -donde existen restos que van desde la época fenicia hasta el siglo I y II d. C- y que desde 2006 hasta la actualidad han ido apareciendo paulatinamente, a tenor de las obras de distintas promociones privadas realizadas en la zona, incluida ésta de Procasa.

En la actualidad y hasta final de año se está procediendo al estudio de estos hallazgos, antes de ser depositados en el Museo de Cádiz.