Dos estamentos comparecen en esta exposición que se presenta en el Campus de la Asunción. Por un lado la espléndida y espectacular dimensión formal que patrocina. Con un dominio absoluto de la técnica, con un conocimiento plástico que abruma, con una capacidad para posicionar la realidad en su estamento más ilustrativo, con un dibujo elegante, sabio, determinante y lleno de fuerza expresiva, con una línea gráfica realizada a bolígrafo BIC y con un cuerpo ilustrativo sin fisuras, estando por encima de las infinitas complejidades estructurales que desentraña la utilización del bolígrafo. Por otro lado, el poderoso mensaje social que lleva implícito; planteando la problemática existente sobre los numerosos animales que existen en peligro de extinción.

El artista pinta las imágenes de forma minuciosa, apabullante en su claridad representativa, con una verdad ilustrativa asombrante y una perfección formal absoluta. El espectador se siente abrumado ante tanto poder plástico. Cuando la mirada se acostumbra ante la perfección de lo concreto, capta muchas más situaciones. Se da cuenta de que no es un dibujo al uso, sino dificilísimas líneas dibujadas a bolígrafo, comprendiendo su dificultad y dejándose deslumbrar por la fortaleza de la composición ejercida desde tan complejo medio.

Junto a los dibujos de los animales informa de la situación que atraviesan actualmente

Desde ese segmento absolutamente dimensionado por la contundencia formal se accede a una realidad conceptual que, como ocurre con la dimensión plástica, deja entrever una idea que no deja indiferente. El artista recurre a una realidad social de gran impacto, la desaparición paulatina y constante de una serie de animales en manos de ese depredador gigante y poderoso que es el hombre con el fin de beneficiarse de algunas de las partes de los mismos y comerciar con ellos. Animales salvajes de muy amplia naturaleza -león, tiburón, gorila, oso polar, tigre, águila imperial, rinoceronte, atún, orangután y elefante- son cazados, de manera impune, por mafias que provocan que sean especies en altísimo riesgo de desaparecer.

Paco Mármol demuestra con la exposición un compromiso inmenso con el medio ambiente, buscando crear una conciencia ecológica en defensa de estos animales y de protección de la naturaleza. Junto a cada dibujo, el artista acompaña otro, realizado con la misma técnica y el mismo rigor plástico en el que se narran las consecuencias que pueden llevar a tales animales a su casi extinción. Al lado de los dos dibujos, el espectador encontrará, a modo de cartela informativa, un breve texto que informa de la situación de cada animal y su peligro. Con todo ello, el artista consigue despertar la conciencia hacia tal problemática, al tiempo que hace llegar hasta el espectador una amplia visión de una realidad de profundo alcance social.

La exposición que se presenta en los espacios expositivos del Campus de la Asunción nos conduce por una impactante colección de dibujos relatores de un trabajo minucioso, paciente y lleno de sentido plástico que, tras su absoluta perfección formal, nos pone en la sintonía de una problemática social de fuerte y descarnado impacto.

Paco Mármol es un artista que nos conduce por una práctica sin fisuras que, al mismo tiempo, crea una conciencia en defensa del tan maltratado medio ambiente.