La Central Lechera se apresta a convertirse en el soporte cultural de la capital gaditana en el primer trimestre del año, cuando el principal espacio escénico de la ciudad, el Teatro Falla, aparca su programación para acoger el concurso de agrupaciones carnavalescas y la sala de la plaza de Argüelles casi monopoliza la oferta municipal gaditana de teatro, títeres, danza, flamenco o música. La Lechera arranca así 2009, lo hará el próximo día 16 con música africana, manteniendo su filosofía de propuestas jóvenes, innovadoras y arriesgadas, y de agrupar los espectáculos por ciclos y, además, asignarles a éstos un día determinado de la semana para que el público pueda identificarlos con más facilidad.

Así sucederá, por ejemplo, con el ciclo Músicas del Mundo, para el que la Central lechera reservará la noche de los viernes; el ciclo para los niños, que será la tarde de los sábados; Escena Abierta, cuyas vanguardistas propuestas se ofrecerán los jueves, o el jazz de Rising Star, que será los miércoles. Otros ciclos, como el de los Flamencos de Cádiz del Siglo XXI o Espacio Abierto o el de teatro, mantienen su flexibilidad en el calendario.

El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Cádiz, Antonio Castillo, y el coordinador de los teatros gaditanos, Pepe Vélez, destacaron de la programación del trimestre la asociación de cada ciclo con un mismo día y la apuesta por hacer de La Lechera un espacio escénico en el que tengan cabida las nuevas vanguardias artísticas españolas, que quedan encuadradas, sobre todo, en el ciclo Escena Abierta.

Será Músicas del Mundo quien abra la programación de 2009 con la música afroafricana de Obibasé, que ofrecerá el próximo 16 de este mes su espectáculo Generación Muvé. En febrero será el turno de Djambutu Thiossane, de Senegal, mientras que Madagascar será el invitado de marzo con Kilema.

Pepe Vélez, además, hizo especial hincapié en el ciclo Escena Abierta, el que quizás se acerca más y mejor a la filosofía que los responsables de los espacios escénicos de la capital quieren dar a salas como la Central Lechera o a iniciativas como El Hervidero. Lo nuevo, lo más arriesgado e incluso lo más rompedor y radical encuentra acomodo en un ciclo para el que este trimestre reserva cuatro citas: la compañía Los Corderos, con El hombre visible (enero ); David Espinosa, que ofrecerá Delirios de grandeza (febrero); y Daniel Abreu, con Perro, y Sergi Faustino, con la obra De los condenados (ambos en marzo).

Pepe Vélez destacó ayer que Sergi Faustino repite presencia en Cádiz, después de actuar hace algunos años "con un trabajo muy radical", y viene además avalado por el premio que recibió el año pasado por su obra en la Feria Internacional de Teatro y Danza de Huesca.

Los más pequeños tendrán también oportunidad de iniciarse en la visita a los espacios escénicos, labor fundamental para forjar el público del futuro, con el ciclo Los sábados... para los niños. Habrá danza, con la obra La ratita presumida a cargo de la compañía Aladetrés; títeres con Caracartón, que pondrá en escena la obra Cascarón de huevo, y teatro con la compañía Bric a Brac, que ofrecerá C'est la vie.

El flamenco tampoco faltará a su cita en la Central Lechera con el ciclo dedicado a los artistas de Cádiz que despuntan en el nuevo siglo: el baile de Claudia Cruz y de Carlos Carbonell y el cante de María del Mar Fernández.

El ciclo Rising Star, organizado junto a la UCA y con el patrocinio de Cajasol, llega por su parte a su décima edición con las actuaciones, en este primer trimestre, de The Blessing, Yaron Herman Trío y Shanga Quartet.

Y habrá teatro hecho en Cádiz, con La Baranda (Alma de revista) o Candilejas (No hay burlas con el amor), y obras representadas por grupos de la Once de Cádiz y Algeciras. Castillo, que agradeció la renovada colaboración de Diario de Cádiz, destacó el carácter "abierto" de la sala de Argüelles.