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Cultura

"¡Ay, ay, ay, la Pantoja es lo que hay!"

  • La tonadillera, visiblemente emocionada, repasó anoche en el Auditorio Municipal sus mejores éxitos ante cerca de 2.000 fans incondicionales, que no dudaron en animarla a cada momento

Se la esperaba más que nunca y ella cumplió con las expectativas. Isabel Pantoja derrochó emoción, entrega y teatro ante las cerca de 2.000 personas llamadas ayer a animar en el Auditorio Municipal.

Desde las dos de la tarde en los aledaños del recinto, cámaras y periodistas de la prensa del corazón intentaban conseguir la imagen de la protagonista de la noche, ya fuera ofreciendo dinero a la organización del concierto por entrar o intentando saltar el muro. Pero las normas eran muy estrictas. Nada de cámaras ni medios de comunicación, excepto la prensa local.

A las nueve y media de la noche, sus incondicionales iban entrando a la carpa de invierno, algunos de ellos con ramos de flores. Una vez dentro, empezarían los vítores. A las diez y media de la noche, al grito de "¡ay, ay, ay, la Pantoja es lo que hay!", la tonadillera, con media hora de retraso, salió a escena.

Visiblemente más delgada y vestida de un azul impecable, la cantante comenzó a desgranar su repertorio más añejo. Rescató La Pantoja es la Pantoja de sus primeros 20 años y el público entero se puso en pie. Sin mediar palabra, la protagonista continuó con Garlochí a coro con el público e interrumpido por un "viva Málaga" con el que se metió a su gente en el bolsillo.

Convincente en su papel de sufridora, la artista se secaba las lágrimas y dejaba que la orquesta siguiera sonando hasta recuperarse de la emoción. El show debía continuar y la folclórica cumplió con una voz más desgarrada de lo normal.

Para sorpresa de muchos, el espectáculo que anunciaba su productora, Así es la vida, no hizo escala en Málaga. Éste incluía un montaje de imágenes y bailarines de los que la Pantoja prescindió anoche para optar por un formato más sencillo e intimista.

El recital levantó, si cabe, mayor expectación por la acusación lanzada desde la Fiscalía contra la tonadillera este mismo miércoles. Anticorrupción pide tres años y medio de prisión para Pantoja por el supuesto blanqueo de 1,8 millones de euros. Con Hoy quiero confesar, ella seguía cantando.

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