De pequeña, cuando viajaba con mis padres a los Estados Unidos, encontraba en las habitaciones de los hoteles una biblia. Solía estar en la mesita de noche, junto al horario de las misas. Había entonces una forma de actuar y de pensar que no estaba reñida con la religiosidad, sino que la misma era parte esencial de la vida. Se podría suponer que en aquellos tiempos el ser humano, en términos generales, ponía un poco más de su parte para vivir conforme a ciertos principios, los cuales contribuían a una convivencia armónica. Qué gran contraste con la banalidad del mundo de hoy y la carencia de un patrimonio moral capaz de enriquecer los comportamientos de las sociedades.

La pérdida constante de valores ha modificado los escenarios y un relativismo feroz se ha colado en las familias, en las creencias y en las tradiciones. Estamos a las puertas de la Navidad y veo como las grandes campañas de marketing frivolizan esta festividad religiosa logrando que todo se reduzca a una compraventa frenética de regalos que solo sirve para engrosar el consumismo y aturdir a aquellos que, sin reflexionar, siguen las tendencias que se les marcan. De esta manera se puede tener una celebración con muchos brillos pero nada brillante, porque carece de sentido.

Cada vez un número más reducido de personas es consciente de lo que significa celebrar el advenimiento del Señor. En muchos hogares ya ni siquiera se pone un belén, sino que todo se limita a agasajarse unos a otros sin festejar al protagonista, a Jesús recién nacido. Olvidar lo que ha sobrevivido durante más de dos mil años no es progresar, sino todo lo contrario. Es dejar un vacío en las generaciones que nos sucedan quienes a su vez, no podrán transmitir a sus hijos tan grandioso acontecimiento.

La Navidad hay que vivirla con el júbilo de un alma que entra en el misterio del Verbo Encarnado que es Jesús, Hijo de Dios y de María, para arrullar al niño que está en el pesebre, que tiene sueño y no se duerme.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios