El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró que si es necesario llevar la reforma adelante es para mejorar la situación, en concreto, de la educación y de la sanidad de los ciudadanos, "vivan donde vivan".

Así se manifestó el presidente al ser preguntado hoy por esta cuestión en la rueda de prensa posterior a su encuentro con el presidente de Ecuador, Rafael Correa. "Esto no es un debate entre territorios, es un debate para las personas, para la educación y la sanidad. Es el hilo conductor y el eje que el Gobierno va a tener", manifestó el dirigente socialista.

Rodríguez Zapatero, que adelantó que las próximas semanas y meses tratará con los presidentes autonómicos esta cuestión, explicó que el grueso del gasto de los Gobiernos regionales se dedica a las dos materias señaladas y que lo que "justifica que tengamos que hacer un esfuerzo" es la necesidad de mejorarlas. El presidente abundó en que hacen falta mejores instalaciones y medios educativos y sanitarios en todo el país, con servicios más ágiles.

Cohesión, solidaridad y atención al Estado

Tras mostrarse seguro de que se llegará a un acuerdo pese a las actuales diferencias, el Jefe del Ejecutivo señaló que el Gobierno mantendrá en este debate tres principios: la cohesión territorial, la solidaridad entre Comunidades y la suficiencia financiera también del Estado, que será responsable en cualquier caso de al menos el 50 por ciento del gasto público total.

"Cuando hablamos del modelo de financiación, hablamos también del modelo de financiación del Estado, del común, de lo que es de todos, de lo que administra el Gobierno de España, que ha de tener su adecuada financiación", advirtió el presidente.

En cuanto a la defensa de la cohesión y la solidaridad entre territorios, José Luis Rodríguez Zapatero aseguró que son los principios que aseguran que los ciudadanos tengan "los servicios adecuados vivan donde vivan" y teniendo "en cuenta", agregó, "que hay circunstancias diferentes" en cada región.

Unas autonomías, precisó el presidente, cuentan con la población concentrada en ciudades y otras, diseminada por el territorio; unas reciben mucha inmigración y otras, no. "Tienen necesidades distintas y a todas vamos a intentar atender y dar respuesta", recalcó.

El jefe del Ejecutivo afirmó que hay "tiempo" para afrontar este debate y que lo importante es que se cuenta con la voluntad de llegar a un acuerdo, también con las Comunidades del PP, a las que se refirió expresamente.

"En un país que crece en su riqueza y en sus necesidades, vamos a trabajar en un modelo que pueda ser apoyado por todos. Sabiendo, como es normal que cada Comunidad va a poner por delante sus propias necesidades, los criterios que más le puedan convenir. Es lógico, ha sido siempre así y lo será ahora. Para eso está la democracia, la deliberación y la capacidad de llegar a acuerdos", concluyó.