El diputado y ex ministro Juan Costa sondea desde hace semanas a numerosos parlamentarios porque medita una posible candidatura alternativa a la de Mariano Rajoy en el congreso de junio, confirmaron ayer fuentes populares. Costa, que coordinó el programa del PP para el 9-M, no ha ocupado ningún puesto de responsabilidad en la nueva dirección parlamentaria que encabeza Soraya Sáenz y se mantiene en un discreto segundo plano, sin apenas apariciones públicas.

Varios dirigentes del PP confiesan que el ex ministro se está "pensando" presentar una lista alternativa pese a que él mismo es consciente de que tiene pocas posibilidades de ganar a Rajoy. Es más, recuerdan que la situación se ha complicado tras el amago de Esperanza Aguirre, ya que "el pulso" que echó a Rajoy tan sólo dos semanas después del 9-M hizo que barones y destacados dirigentes cerraran filas en torno al presidente nacional, que ha recabado ya numerosos avales.

Sea como fuere, y en medio de la crisis, Costa sigue sin cerrar la puerta. "Ni ha tirado la toalla ni está decidido del todo", declaraba un diputado que elogia la valentía que tendría si decide dar un paso adelante a pesar de que no consiga recabar todos los avales necesarios. La conveniencia de que haya una lista alternativa cuenta con numerosos adeptos en las filas populares, porque entienden que podría ser una manera de canalizar el descontento que, según algunos de los consultados, está generado la actuación del presidente del PP. Hay quien señala que cada vez son más los cargos del PP que desean que haya otro candidato, sobre todo desde que se desató la crisis con la presidenta del PP vasco, María San Gil, cuya decisión de no optar a la reelección muchos achacan a la "mala gestión" y "falta de mano izquierda" de Rajoy. Costa advirtió ayer que no se resigna a "renunciar a contar con las ideas que ha defendido San Gil".