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"Que haya tantos cambios en enero no es normal"

  • Casas habla sobre la política del club y no se inquieta por la llegada de atacantes

Llegó para ser uno de los elementos fundamentales del ataque cadista, pero con el paso de los jornadas su protagonismo ha ido a menos. Gastón Casas saltó al césped el sábado en el tramo final del encuentro y acumula 962 minutos desde que comenzara la campaña, lejos de los 1.406 de Dani, por ejemplo. Con la llegada de Natalio y de Bangoura tiene más competencia, pero se muestra tranquilo y confiado en sus posibilidades.

Al argentino le ha sorprendido el movimiento de entradas y salidas que se ha producido en el club en el último mes y saca sus propias conclusiones: "No es normal que se vayan cuatro o cinco jugadores y que lleguen tres en el mercado de enero cuando lo que se busca es estar en los puestos altos. Supongo que habrán pesado circunstancias externas, cuestiones del club que no son las idóneas dentro de lo futbolístico".

El delantero entiende que los aficionados reclamen la presencia en el once titular de los fichajes que acaban de llegar, aunque confía en sus opciones: "Que hayan venido jugadores para reforzar el ataque no quiere decir que tengan que jugar más que los que estaban. Aquí todos se tienen que ganar el puesto en los entrenamientos. Obviamente, no puedo estar contento porque el sábado sólo jugué los últimos minutos, pero creo que hay que ganarse la confianza del entrenador en los entrenamientos".

Casas admite que su situación es difícil de llevar y considera que su aportación merecería otra respuesta por parte del entrenador: "Es complicado lo que me está pasando porque no suele pasar que el máximo goleador del equipo no juegue. Me gustaría disfrutar de una mayor continuidad, pero no voy a bajar la guardia. A la larga, lo que vale es el esfuerzo y yo no pienso que vaya a jugar menos que el resto de mis compañeros. Si no estoy jugando ahora es por una decisión del entrenador que hay que respetar, aunque creo que no está mal la proporción de goles que llevo por los minutos que juego. La cifra no está nada mal para un equipo que está por debajo de la mitad de la tabla. Si el entrenador prefiere a otros jugadores, lo único que puedo hacer es seguir trabajando para convencerlo. Ya tengo experiencia en esto".

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