Semifinales · turquía-alemania

Terim piensa en el portero-delantero

  • Con 10 bajas, los otomanos alinearían a su tercer guardameta como jugador de campo

El capitán de la selección turca, Nihat Kahveci, no podrá volver a jugar en la Eurocopa, tras confirmarse que la lesión en los abductores le mantendrá inactivo más de una semana. El delantero del Villarreal ya estaba descartado para la semifinal que disputará Turquía contra Alemania el miércoles en Basilea, pero la confirmación de que no puede continuar en la Eurocopa llegó ayer, por lo que ha decidido regresar a España. Con la ausencia de Nihat, el seleccionador turco, Fatih Terim, tiene un total de diez bajas, entre lesionados y sancionados, y no dispone más que de 11 jugadores de campo y dos guardametas, lo que le ha llevado a plantearse la posibilidad de que el tercer portero, Tolga Zengin, tenga que entrar en el campo en algún momento del partido para jugar como central o como delantero centro.

Además de Nihat, Tumer Metin y Emre Belozoglu están lesionados desde el inicio de la Eurocopa, y Emre Gungor y Ayhan cayeron tras la fase de grupos. Servet Çetin, el baluarte defensivo de Turquía, también se lesionó en el partido contra la República Checa y tendrá muy difícil recuperarse antes del miércoles. Descartados por acumulación de tarjetas están Tuncay Sanli, Arda Turan y Emre Asik, además del guardameta Volkan Demirel, sobre el que la UEFA deberá dirimir hoy si le perdona uno de los partidos de sanción impuestos tras su empujón al checo Koller.

La única buena noticia es que ante Alemania Mehmet Aurelio podrá ser alineado por haber cumplido ya su partido de sanción. Las normas de la UEFA para este torneo permiten que haya sustitución de jugadores por lesión tan sólo antes de que se dispute el primer partido, por lo que Terim ya piensa en que el meta Tolga Zengin cambie de posición. El portero del Trabzonspor, de 25 años, podría ayudar en defensa o ejercer como hombre boya, en el área rival. "El podría entrar al final como último hombre o como delantero centro. No podemos permitirnos el lujo de que los jugadores escojan dónde quieren jugar", dijo ayer Terim.

El entrenador turco, sin embargo, no quiere caer en el victimismo y afirma que su selección, que se ha clasificado tras remontar tres partidos en los últimos partidos, es capaz de un nuevo milagro. "Ya hemos demostrado muchas veces que podemos lograr lo imposible. Tengo fe en mi equipo y en nuestra habilidad para alcanzar la final", afirmó.

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