El Tau Vitoria logró una victoria de vital importancia frente al Barcelona en el partido que inauguró la final de la ACB 2008, anulando la ventaja de campo de los azulgrana gracias al buen hacer del brasileño Tiago Splitter.

El equipo blaugrana salió a por todas, pero su gran inicio resultaría un espejismo. Hasta cuatro triples en los tres primeros minutos anotaron los locales, abriendo pronto hueco en el electrónico. Después, Ilyasova frenó la reacción (parcial de 0-9) ceramista. Sin embargo, Teletovic se encargaría de mantener a los suyos por delante desde la larga distancia.

El acierto del bosnio serviría de pistoletazo de salida para los de Neven Spahija. Si en el primer cuarto era el equipo culé quien abría la veda con un parcial de inicio de 8-0, los vascos devolvieron la moneda en el segundo periodo.

En la reanudación, los equipos parecieron tomar conciencia de lo que había en juego, y ajustaron sus defensas. La tarea de anotar se hizo más ardua, y una vez más Ilyasova acudió al rescate su equipo. El esfuerzo del turco atrás y su gran momento en ataque redujeron las distancias a cuatro puntos.

Pero los vitorianos supieron mantener la calma, y con ella la iniciativa del partido. El conjunto baskonista tiró de oficio cuando más apretado se puso el partido y terminó amarrando el triunfo.