El Sporting San Fernando perdió una gran oportunidad de poder abandonar definitivamente los puestos bajos de la clasificación y cayó derrotado contra todo pronóstico ante un rival directo en la lucha por la permanencia, el Rosal.

La grata imagen que había ofrecido el conjunto entrenado por Jesús Acal en los últimos partidos disputados ante sus aficionados quedó rota ayer al encajar una derrota que puede ser tremendamente definitiva en el transcurrir de la competición, ya que es un revés con el que no se contaba en el cuadro de La Isla.

La primera mitad no fue buena y ambos equipos hicieron muy poco por conquistar el triunfo ya que, ofreciendo una pobre imagen, los dos equipos se ocuparon mucho más de mantener al rival a raya que crear las ocasiones necesarias para lograr el triunfo.

Sólo cabe destacar en este primer periodo una jugada clara de gol protagonizada por Adrián que remató un balón en el segundo palo, obligando a lucirse a Jacob. Corría entonces el minuto 35 y hasta el final de la primera parte, nada de nada, por lo que el aburrimiento fue la nota predominante.

En la segunda parte cambiaron los argumentos, sobre todo porque el empuje del equipo de Jesús Acal se tradujo en dos rápidos contragolpes que prácticamente finiquitaron el choque. En el primer de ellos, tres minutos después de la vuelta de los dos equipos al terreno de juego, Alberto aprovechó perfectamente un pase al hueco para poner el cero a uno, y nueve minutos después fue Navarro el que dio por terminado el encuentro en un bonito contragolpe.

Los de La Isla lo intentaron de todas las maneras, pero el orden del Rosal no permitió en ningún momento soñar con la remontada, máxime cuando el tanto que acercaba en el marcador a los locales llegaba en el minuto 85 cuando, prácticamente, el partido expiraba y los onubenses defendían en todas las zonas del campo.

El tanto local vino precedido de un error de la defensa visitante que aprovechó con acierto Antonio, si bien el empuje posterior del Sporting isleño no se tradujo en un segundo gol que, como mal menor, hubiera dejado un punto muy necesario en el casillero de los locales.

En definitiva, duro e inesperado traspiés el que sufre el conjunto isleño y que ve truncada sus aspiraciones de conseguir cuanto antes permanencia, un objetivo que resulta mucho más costoso a medida que avanza la competición.