El equipo juvenil del San Fernando Plaza Isleño se quedó a las puertas de la final de la Copa de España de la categoría que acoge Bahía Sur desde el pasado miércoles tras caer en semifinales con el vigente campeón, un Bobadilla Las Rozas que estuvo contra las cuerdas pero se repuso a tiempo.

Consciente de que se medía al vigente campeón, el conjunto de Carlos Contreras saltó a la pista con máxima concentración y dispuesto a combatir con garra y entusiasmo la calidad de su rival. Y la apuesta le dio resultado porque, contenida la avalancha inicial de los madrileños, el Plaza empezó a crear peligro y golpeó primero gracias a Juan Alberto.

La reacción visitante, con el tanto de la igulada, obra de Palomeque, encontró réplica poco antes del descanso en una primorosa combinación de Poti y Guerra. 2-1 y anuncio de más batalla.

En la reanudación, el acierto primero Paleta y luego de Guerra, de nuevo, multiplicaron por mil la alegría de la afición isleña, una ilusión que quedó resquebrajada con la lesión de Luis y seriamente tocada cuando el Boadilla recortó distancias y, sobre todo, cuando sacó al portero-jugador para ir definitivamente a por la victoria.

Así y todo, pese a la adversidad, los últimos minutos fueron un toma y daca, con descaro ofensivo de Las Rozas incluso en inferioridad numérica y contras mortales pero no efectivas del Plaza isleño. Sin embargo, la suerte sonrió al campeón. Álvaro le metió de lleno en la pelea con el 4-3 y David Martín se encargó primero de empatar y después de apuntillar. Una pena para el anfitrión y justo premio a la fe del Boadilla, que luchará hoy por el título a las 13:00 con ElPozo, verdugo del Barça (3-4).