Acabó el culebrón. En el seno del Club Deportivo San Fernando corren nuevos vientos y todo hace indicar que la tranquilidad se apoderará del cuadro azulino en los próximos días.

Eso es lo que indicaba el día de ayer ya que el fin de semana ha sido apasionante y definitivo. En un principio, los acontecimientos se centraron en una reunión de urgencia de la junta directiva, donde ya no estaba presente Ángel Serrano. Manolo Acosta se puso en contacto con el alcalde, Manuel María de Bernardo, para explicar la caótica situación que se vivía y éste contacto con Delfín Cañas que, minutos después, se ponía en contacto con la junta.

Al teléfono, el empresario riojano llegaba a la determinación de cumplir, definitivamente, su compromiso de pago mediante unos pagarés, avalado por unas escrituras de una finca de su propiedad. A la misma vez, se comunicaba las fechas de pagos de los pagarés y el empresario dejaba, entonces, el mando de la entidad a la junta directiva, comunicando que Ángel Serrano se desligaba también del equipo azulino.

Los acontecimientos corrieron como la pólvora y, desde ese mismo instante, Manolo Acosta asumía el mandato total del club. Su idea. Replantear la temporada, suprimir el mayor número de gastos, potenciar la captación de socios y comenzar un periodo de austeridad.

Así, ya ejerciendo como máximo mandatario, junto a su junta directiva, donde Fernando Rodríguez y Joaquín Cardoso, continuarán de vicepresidentes, la primera decisión que se tomó fue la de llegar a un acuerdo con el secretario técnico, Fali Castañeda, que ayer, igualmente, terminó su compromiso en el equipo azulino, llegando ambas partes a un acuerdo unilateral.

La situación, de la misma manera, repercutió en el equipo que, tras una rápida reunión decidió, rápidamente, apoyar el nuevo proyecto y volver al trabajo el mismo lunes.

Los acontecimientos continuaron disparándose y ayer se confirmaba la vuelta del centrocampista Casabella, así como la llegada de nuevos jugadores como es el caso del defensa Pablo López, procedente de las escalas inferiores del Atlético de Madrid, Rudy, delantero centro del Almería B y el lateral Roberto, que en temporadas anteriores había pertenecido a la Balona. Igualmente se anunció que en las próximas fechas llegarán el delantero centro Toni Corbayé, del Getafe y Pablo Carrascosa.

Estos jugadores estarán a prueba a las órdenes de Antonio Iriondo, que será el último en determinar si se quedan en el equipo.

Ya por la tarde, el presidente se reunió en el propio estadio con los jugadores, para comunicarles todos los avatares sufridos en el club en las últimas horas.

Acosta anunció la marcha de Ángel Serrano y Fali Castañeda, y comunicó a los jugadores la política de austeridad que se llevará a cabo, la negociación de los pagarés, así como dio las gracias al plantel por la confianza prestada al volver a trabajar con normalidad.

El equipo isleño, dentro de su preparación jugará hoy en Conil e, igualmente, realizará la presentación ante sus aficionados el domingo, fecha donde se jugará un amistoso ante el Rácing de Santander en un remodelado Bahía Sur. Corren nuevos vientos.