Se hizo la paz en el Portuense. Presidente y jugadores se han dado un respiro en las reivindicaciones porque son conscientes de que lo único que ahora interesa es mantener la calma con el único objetivo de mantener la categoría. Manolo Lores, que llegó el viernes a El Puerto, ha transmitido a través de su gerente, Pepe Calzado, un mensaje de tranquilidad para la plantilla para que se centre sólo y exclusivamente en el encuentro de hoy, del que depende mucho el futuro de la entidad. El estado anímico de la plantilla ha cambiado como la noche y el día. El jueves, después del entrenamiento, organizaron una barbacoa en las dependencias del Cuvillo que sirvió para conseguir mayor unión entre la plantilla.

El hecho de que el Portuense se tenga que enfrentar a equipos que también se encuentran metidos en lío (porque si el Lorca pierde en el Cuvillo se quedaría a un solo punto de los de El Puerto), y tener los de Javier Otero que enfrentarse luego a Mazarrón y Marbella, le hace depender de sí mismo. Con los dos hipotéticos triunfos en casa, el Portuense salvará la categoría, aunque con un gran porcentaje de tener que disputar la permanencia. Todo ello, si todos los equipos, desde el Lorca, décimo tercero, al Portuense, décimo octavo ganan sus partidos como locales. Salvo sorpresa, el Alcalá por el calendario que le queda, Melilla, hoy, luego Cartagena en casa y salida a Águilas, parece tener difícil quedarse en la categoría. También por aquello de que sólo le queda un partido en casa, recibiendo en la última jornada al Mérida y después de su empate ayer en Águilas, el Baza no las tiene todas consigo. Con estos números, que luego tendrán que salir, se está trabajando en el seno rojiblanco. Pero si hoy se empata o pierde, la Tercera División estará mucho más cerca. De ahí, la trascendencia de los puntos de esta tarde y el primer paso lo ha dado la junta directiva, abriendo las puertas de Preferencia, para que los jugadores que se enfunden la camiseta roja sientan el calor de sus aficionados.

Mención aparte tiene también la designación del colegiado castellano-manchego López López, de triste recuerdo para la historia racinguista, ya que fue quién tuvo buena parte de culpa de la eliminación del Portuense frente al Rayo Vallecano, en la última fase de ascenso a Segunda A. En el Cuvillo, con 0-1, se comió un córner en el despeje del portero vallecano Alberto, lo que propició, que el saque de portería, terminase en penalti a favor de los visitantes por un derribo de Salido a Michel. Los de El Puerto, también perdieron con el mismo colegiado en noviembre de 2006 por 1-2 frente al Mérida.

Javier Otero, por lo visto el jueves en el partidillo, trabajará mucho la presión. A la defensa volverán Velázquez y Alex Cruz en los laterales, junto a Óscar Rodríguez y Merino por el centro. Luego una línea de cuatro jugadores con Viyuela en banda derecha. Luego están Suárez y Dani Zúñiga por el centro, junto a Zurdo en la izquierda. Como el encuentro hay que ganarlo como sea, Javier Otero, saldrá con dos delanteros nato: Paulino, que vuelve y Raúl Molina. La participación del jerezano en los encuentros que restan tendrá mucho que decir en la permanencia.