El Cádiz no perdió un partido como visitante hasta que cayó en Cuenca el pasado 1 de febrero, pero sucumbió también en Melilla en el siguiente desplazamiento. Esto debe haber servido como enseñanza a un equipo que está siendo tremendamente regular y que, quizá, está siendo juzgado con excesiva severidad en algunos momentos viendo lo realmente complicado que es ganar un partido.

Javi Gracia habló en rueda de prensa en el día de ayer y no sacó pecho por la trayectoria del equipo porque nunca lo ha hecho hasta el momento, a pesar de que en la pasada jornada se haya comprobado con el empate del Poli Ejido que lo que está haciendo el Cádiz tiene más mérito de lo que muchos piensan. El técnico dice que el equipo nunca ha perdido la humildad y que ahora es el peor momento para creerse algo, por más que siga aventajando en siete puntos al segundo.

"Hay que ser conscientes de que cada partido será una historia diferente y que estará marcado por detalles o por un inicio desafortunado, como nos pasó a nosotros en Melilla. El otro día se comprobó que el Poli Ejido no pudo hacerle un gol al San Fernando ni cuando estuvo con un jugador más sobre el campo. Todos tenemos una gran dificultad para ganar los partidos porque quedan 12 jornadas y todos ven peligrar sus objetivos. Yo soy plenamente consciente de ello y lo deberían ser todos. El equipo nunca ha perdido la humildad desde que empezó la Liga y sabemos que el rival que se nos ponga por delante cada domingo será duro, sea cual sea. Es importante que no se pierda la humildad porque pensar que lo que queda será fácil es el primer paso para equivocarnos", remarca el técnico.

No va a haber la menor relajación pensando en el partido del próximo domingo porque se sabe que el Ceuta tiene un buen equipo y porque el Alfonso Murube es un campo complicado para cualquiera, aunque algunos hayan conseguido ganar allí esta misma campaña. ¿Se verá un Cádiz diferente después de haber perdido en sus dos últimas salidas? Gracia anticipa que puede haber algún cambio: "Intentaremos retomar la gran mayoría de los resultados que habíamos tenido como visitantes antes del partido de Cuenca porque habían sido positivos. Hay que estar alertas para no incurrir en los errores que han provocados dos derrotas seguidas. Vamos a cambiar alguna cosa, pero el equipo ha demostrado que sabe comportarse como visitante aunque en los dos últimos partidos no hayamos sido merecedores de buenos resultados".

El ánimo ahora es mejor que el que había hace una semana y lo reconoce el propio entrenador cadista: "Las semanas en las que consigues un buen resultado ves reforzado el ánimo y el ambiente es más relajado. Estamos trabajando con la misma intensidad de siempre, pero es un hecho que ayuda".

El ambiente está distendido y no se piensa en lo que puede pasar en el Alfonso Murube en cuanto al ambiente que puede rodear al partido. Benigno Sánchez, el entrenador del Ceuta, ha comentado a este periódico que todo lo sucedido en el partido de la primera vuelta está olvidado y Gracia tiene la experiencia de que aquel campo no se caracteriza por ser un infierno para sus rivales: "El año pasado tuve la ocasión de jugar allí un partido de la fase de ascenso, con lo que ello conlleva, y el trato que recibimos fue fenomenal. Como es lógico, el público anima a su equipo y con el rival hay el lógico pique deportivo, pero no había un ambiente especialmente hostil. El comportamiento fue más que correcto".

Ahondando en este tema, cuando se le preguntaba al técnico navarro por los incidentes acaecidos al final del Cádiz-Ceuta de la primera vuelta, se mostraba de lo más conciliador: "Al final de aquel partido hubo algún malentendido quizá propiciado por el resultado. A nadie le gusta encajar tantos goles y por eso pudo haber algún pique, pero son cosas normales que pasan con frecuencia. Entiendo que ahora no se van a sacar de contexto y yo incluso hablé con algún jugador del Ceuta al que conocía por haber jugado antes en el Pontevedra y me decía que estaba todo olvidado. En Cádiz el comportamiento siempre es ejemplar".

Sobre la eliminación sufrida contra el Ceuta siendo entrenador del Pontevedra señala que "son momentos que duelen, pero que se olvidan. No voy a estar siempre recordando aquello porque ya en su momento, cuando más nos dolía porque se tiraba el trabajo de todo un año, ya dije que el Ceuta había ganado merecidamente".