El entrenador del Racing Portuense, Alberto Ferri, estima que su equipo será "muy competitivo" y que desplegará un juego "que gustará más o menos" pero sobre el que el aficionado "debe entender que el presupuesto para la plantilla supone la tercera parte del disfrutado la campaña anterior".

El técnico rojiblanco advierte que la dotación económica de que se dispone para este ejercicio provoca "que los futbolistas y el juego tengan otras características", si bien señala que el público puede estar tranquilo "porque los que salten se dejarán la piel en el césped".

Ferri tiene claro que "la misión número uno es salvar la categoría lo antes posible", de modo que "si después sobran partidos se mirarán otras cosas", teniendo en cuenta que en el grupo "hay 15 escuadras con un presupuesto mayor".

El preparador catalán reconoce que "no se pueden vender quimeras" y se muestra satisfecho de la marcha de la pretemporada. Sobre la victoria cosechada en el amistoso del pasado domingo ante el Sporting San Fernando (0-2), comenta que "los jugadores estuvieron un poco cansados, pues la semana registró una notable carga física", pero se complace porque los suyos "permanezcan imbatidos hasta la fecha pese a las lesiones".

"El Racing ofreció el domingo mejor imagen en colocación, pero debe progresar en posesión de balón, rifándolo menos y perfeccionando las apoyaturas", afirma Ferri, que siente "las ausencias de los dos canalizadores, Kikín y Diego Ramírez".

El entrenador del Portuense entiende que el equipo está tácticamente "perfecto", que técnicamente "debe mejorar" y que físicamente "marcha al 70%, pero estará al 100% en el debut frente al Antequera".

El técnico indica tener cada vez más claro "quiénes serán los jugadores que empezarán la liga" y se queda con la actitud del conjunto, que califica de "extraordinaria" y con el hecho de que en cinco partidos de pretemporada "sólo se hayan encajado dos goles, uno en Puerto Real en un córner y otro ante el Cádiz en un rechace, lo que demuestra que el Racing aún no ha sido batido en jugada, toda vez que sus dos líneas maniobran bien juntitas, los puntas y el mediocampo presionan bien y la defensa actúa organizada".

Alberto Ferri lamenta las bajas de Mauro Zanotti y Nacho Garrido, que muy probablemente no podrán jugar contra el Antequera en el debut liguero en casa, si bien confía en que Kikín, Diego Ramírez y Dani Carrasco sean de la partida, aunque reconoce que las lesiones "están trastocando los planes".

Al entrenador le hubiera gustado medirse a un equipo de Segunda A, "pero el Xerez alegó problemas de agenda por tener el calendario completo", siendo sustituido el cuadro azulino por el Rayo Sanluqueño.

Sobre los partidos disputados esta pretemporada, Ferri afirma que "la prueba de fuego se produjo contra el Cádiz", donde su equipo "dominó la primera mitad", aunque reconoció la superioridad amarilla en la segunda parte.