El ciclista italiano Franco Pellizotti (Liquigas) se impuso en la dura cronoescalada de 12,9 kilómetros entre San Vigilio de Marebbe y Plan de Corones que protagonizaba la 16ª etapa del Giro, en la que Alberto Contador (Astana) mantuvo la maglia rosa tras acabar cuarto por delante de sus principales rivales para la victoria final.

Todas las miradas enfocaban al líder de la montaña, el ciclista local Emanuele Sella (CSF), que buscaba su tercera victoria consecutiva tras sus paseos del fin de semana por los Dolomitas. Cuando todo apuntaba a un nuevo éxito del menudo corredor, apareció Franco Pellizotti como un ciclón y se llevó la victoria por apenas seis segundos de diferencia.

Pero, el triunfo de Pellizotti, su segundo en el Giro tras el de 2006, quedó dilucidado por Alberto Contador, ya que el ciclista madrileño confirmó su candidatura al triunfo final con un cuarto puesto en la etapa que incluso le permitió distanciarse respecto a sus rivales, pese a que su director Johan Bruynnel había pronosticado la pérdida del liderato.

Completamente vestido de rosa, Contador administró un ritmo fluido a su bicicleta que le permitió ser segundo en el paso intermedio por Passo Furcia sólo superado por Sella, mientras que Pellizotti era quinto.

Sin embargo, más duro se le hizo al madrileño el tramo final de la etapa, un kilómetro final terrorífico al 14% con pavimento de tierra compacta en el que el ganador de etapa comenzó a remontar posiciones.

La solvencia del campeón del Tour de Francia dejó tocados a todos sus rivales, especialmente al ganador de la ronda el año pasado, Danilo di Luca (Liquigas), que se queda a dos minutos del líder y que una vez pasado la primera parte de su terreno, no pudo acercarse al español, y sigue con una actuación gris que de momento le ha impedido lograr victoria de etapa o llevar la maglia rosa ni un solo día.

Mejor le fue a Ricardo Ricco (Saunier Duval-Scott), quinto en la etapa tras ceder ocho segundos con Contador, lo que le deja segundo en la general a 41 segundos del español, lo que le perfila como su más directo rival para el triunfo final.

La cronoescalada dejó como grandes damnificados a Menchov (Rabobank), que perdió casi dos minutos, y a Andreas Kloden (Astana), noveno en la clasificación general a algo menos de nueve minutos de Contador.