La tarjeta para residentes de la zona azul costará un 50 por ciento menos en breve. Así lo ha puesto de manifiesto en declaraciones a este medio la delegada municipal de Tráfico, Transporte y Policía Local, Ángeles Polanco, la cual ha asegurado que "ya se han iniciado los trámites administrativos para llevar a cabo dicha reducción en el coste de esta tarjeta, que se creó como una ventaja para los vecinos de calles en las que se aplique el control del estacionamiento a través de la zona azul y cuyo precio hasta ahora era una barbaridad".

De esta forma, una vez que se lleven a cabo los trámites necesarios, lo cual podría suceder en las próximas semanas, la tarjeta para residentes pasará a costar la mitad de lo que costaba hasta ahora, pasando así de los 100 euros anuales que deben pagar los vecinos con zona azul en sus calles a 50 euros. Cabe recordar que dicha tarjeta permite el estacionamiento a los vecinos en cuyas calles existe este sistema de control, y que el pago de dicha cantidad se realiza de forma anual.

En lo que a la aplicación de la medida se refiere, Polanco ha declarado que "aún estamos estudiando la forma de aplicarse, ya que podría realizarse de forma retroactiva desde principio de año o tener en cuenta otras fórmulas posibles para su pago".

Con esta medida, la delegada de Tráfico pretende corregir uno de los principales problemas existentes hasta ahora en la zona azul, según ha manifestado en reiteradas ocasiones, "el excesivo precio que debían pagar los vecinos por aparcar en sus calles", además de tener que soportar las incomodidades propias de este sistema de control del estacionamiento para los residentes.

Al mismo tiempo, y en relación con las tarifas generales de la zona azul, la delegada de Tráfico ha anunciado que se sentará con los responsables de la empresa que gestiona dicho sistema de control del estacionamiento en la ciudad para estudiar la posibilidad de aplicar la subida del IPC a estos precios, "una subida lógica y necesaria para que la empresa adjudicataria pueda seguir prestando este servicio y que el pasado año no se llevó a cabo por el miedo del equipo de gobierno socialista a tomar decisiones impopulares antes de las elecciones que les hicieran perder el sillón de la Alcaldía, aunque éstas fueran lógicas y necesarias". "Esta revisión de los precios es necesaria -continúa manifestando Polanco- sobre todo después de un año como el 2007, en el que la gestión de Zapatero ha situado la inflación en el 4,5 por ciento".

Por otra parte, cabe recordar que la zona azul experimentará a partir del próximo 14 de enero una nueva ampliación en lo que a las calles que afecta se refiere, pasando ésta a aplicarse también en Caraza, Concepción, Albinas, Buey, Cádiz y Fraile.

Esta ampliación de dicho sistema vendrá acompañado, una vez que entre en funcionamiento el nuevo Mercado de Abastos junto a la Plaza de las Bodegas, de diferentes cambios en la circulación de las calles del centro, con la peatonalización de La Plaza como una de las principales medidas.