El museo de la Ciudad, situado en la Casa Briones, ha completado una nueva etapa de adaptación de cara a su próxima apertura, un proceso que está condicionado al desarrollo de las obras que se están llevando a cabo en la Plaza Mayor para la construcción de un aparcamiento subterráneo con capacidad para 350 vehículos y un centro comercial. De momento, esta nueva etapa ha permitido dotar de mobiliario tanto la zona administrativa como las salas didácticas.

De esta forma, el Museo sigue tomando cuerpo tras haberse tenido que corregir incluso deficiencias estructurales en el edificio, una circunstancia que llegó a impedir la recepción de las obras en la fecha prevista.

Actualmente, el Museo cuenta ya con la práctica totalidad de panelería gráfica, así como su mobiliario en la zona visitable.

Esta actuación fue precisamente la que ha dado paso a la fase que acaba de concluir esta misma semana, como es la adecuación de las salas didácticas y la instalación del mobiliario de oficina por parte de la empresa adjudicataria, Maderas Polanco.

Así, en la primera planta del edificio han quedado amuebladas ya las salas didácticas, con mesas y sillas para que los estudiantes puedan realizar trabajos en grupo sobre el contenido del museo. Además, estas salas también podrán tener otro tipo de usos como reuniones, salón multiusos o actos para un público poco numeroso.

En la segunda planta se ha amueblado ya la biblioteca y también una sala de estudio que se destinará a temas de la historia chiclanera en general y del contenido del museo en particular.

Estas salas se han acondicionado con librerías, revisteros, mesas, sillas y todo tipo de mobiliario para acondicionar estos salones para el estudio y la lectura.

En la tercera planta, por último, se han acondicionado las dependencias de administración. La sala de reuniones cuenta ya con todo el mobiliario, además del despacho del auxiliar administrativo, el administrativo y el director del museo.