El Ayuntamiento de Chiclana puso en marcha una serie de medidas para intentar paliar los efectos del catastrazo, si bien los resultados no han dejado satisfechos a muchos ciudadanos debido al espectacular incremento que han experimentado las valoraciones realizadas por el Ministerio de Economía y Hacienda.

Entre las medidas adoptadas, el Consistorio optó por una "subida cero" de impuestos, acompañada de una rebaja en el tipo impositivo del Impuesto de Bienes Inmuebles, que pasó del 0,664 al 0,564. Es decir, una reducción del 15 por ciento en el tipo impositivo.

De cara al futuro, la delega municipal de Hacienda, María Eugenia Fernández, ya confirmó a este Diario que no descarta nuevas reducciones en el tipo impositivo para los próximos años con objeto de minimizar los efectos. Cabe recordar que, pese a todo, la cuota de los recibos irá creciendo paulatinamente conforme vaya reduciéndose la bonificación.

Por otra parte, la delegada municipal de Hacienda también ha adelantado a este Diario que se están haciendo gestiones para que los ciudadanos puedan abonar el próximo año los recibos en dos plazos diferentes, al igual que sucede en la mayoría de localidades de la Bahía de Cádiz.

Cabe recordar que Fernández ya explicó que esta medida no se pudo poner en práctica de cara al presente ejercicio ya que los trámites coincidieron prácticamente con la toma de posesión del nuevo gobierno municipal.

La recaudación del Impuesto de Bienes Inmuebles ha experimentado un espectacular crecimiento en los últimos años y ya constituye una de las principales fuentes de ingresos del municipio. Así, para el presente ejercicio está prevista una recaudación superior a los 17,5 millones de euros, casi 3.000 millones de las antiguas pesetas. Esta cifra contrasta con los apenas 3,7 millones que se recaudaban en 1996. Fue hace tres años, concretamente en 2005, cuando se superó la barrera de los diez millones.