El tipo. Vigías en una torre. las coplas. Un amor que les deja volaeras en su almenara. Locos en su torre, lo escuchan a través de lo que les llega del viento. Una locura que se pierde en el repertorio, ya que su contenido no guarda coherencia entre el tipo, la presentación -que sí cumple con intención de definir la propuesta- y lo que presentan posteriormente en su popurrí, en el que la idea queda completamente difuminada. El grupo, por su parte, se defiende con buenas maneras, aunque con alguna imprecisión en los pasodobles. Se nota la mano de Pacoli en la música de esta pieza, aunque cuando sale del trío y busca el final tiene una parte que sí es muy reconocible. Bastante acertada la primera de las letras a la exclusión de Cádiz de la red de ciudades milenarias promovida por la Junta de Andalucía -la Andalusian Soul-, por lo que critican que la capital gaditana sea "siempre maltratada y siempre complaciente". Tampoco está mal la segunda letra, un canto a la donación a partir de la historia de una persona que estaba esperando la aparición de un donante. El viento hace estragos en los cuplés, ambos flojitos. En el primero, un cubano les cuenta que cuando pasearon a Fidel Castro por Cuba aguantó porque estaba metido en manteca, mientras que en el segundo les dice su mujer que al hacerse una foto desnudo se tape con una pelota de tenis. Viento de tres rayitas.

Puntuaciónes COAC 3