"Somos un equipo". Ese es, para Manolo Morera, el secreto del éxito del Vaporcito CF, el club de fútbol hecho cuarteto que acaparó todas las miradas de la segunda función de cuartos. El autor y capitán de este peculiar equipo salió muy contento tras recibir el cariño de una grada que les esperaba más que a nadie esta noche. "El teatro ha reaccionado muy bien", comentó Morera, que considera que "estamos en un momento en el que sociedad necesita pasarlo bien". 

Su equipo afronta cada partido en el Falla "con la idea de intentar ganarlo y agradar" y por eso tienen "más preparado" por si llega el premio de las semifinales y la final. El primer objetivo, que era pasar el difícil examen de los cuartos de final, ya lo han superado. 

Si Morera es el cerebro, el Xavi de este Vaporcito CF, Carlos Meni se ha convertido en el Messi particular de este cuarteto. Su capacidad de interpretación da muchos puntos a este equipo aunque deja el mérito para "el buen equipo" que forman. Meni tiene la suerte de que le dejan "la pelota botando" para rematar cada chiste y eso viene de "mucho trabajo en los ensayos". Además, "tengo la suerte de que mi personaje siempre gusta a la gente", destaca. 

Pero en un buen equipo no todos pueden ir en busca del gol. También se necesita un Piqué, un Alves o un Valdés que estén siempre al quite. En ese papel destaca Selu Piulestán, "un maestro" como lo define su compañero Carlos. Selu acabó "muy contento" y ve como "una buena señal" la reacción del teatro. "El repertorio ha gustado y la ovación lo ha demostrado", señaló. Ellos han hecho lo que tenían que hacer  y "si el comité de competición lo estima oportuno estaremos en semifinales", concluye.