HOY quiero hablarles de Villanueva. Porque Villanueva, no se puede negar, tiene un aire rústico, pueblerino, cateto.

A mí me gusta esa rusticidad, ese sincero aspecto paleto. No vamos a disimular y vamos a decir la verdad, Villanueva es lo que es, sobre todo popular y sencillo, como el pan moreno, como los chicharrones, como las hojaldrinas, como las moscas de caballo.

Villanueva tiene sus amantes del Carnaval porque organiza un certamen carnavalero y hasta ha sacado agrupaciones, sí que es cierto que muy malas desde el punto de vista del nivel de Cádiz, pero poco a poco se va superando.

Puede que me digan que Villanueva parece vulgar o de mala muerte pero yo creo que deben conocerlo para descubrir su belleza. Tiene muchos atractivos y es una aventura descubrir atractivos ocultos.

Villanueva posee un aroma a boñiga que lo define. Huele a establo, a pueblo. Tal vez su encanto sea ese. No es raro dado que en su área de influencia hay mucho ganado vacuno y numerosas estancias. No olviden que Villanueva de Córdoba está en el valle de los Pedroches, zona ganadera por excelencia, sede de una importante cooperativa láctea.

Recomiendo todos los años a la gente que se vaya de Cádiz en Carnaval. Este año propongo que visiten Villanueva de Córdoba. ¡Menudo pueblo!