DESDE hace algunos años vengo escuchando la posibilidad e incluso, según muchos, la necesidad de profesionalizar el jurado del concurso de agrupaciones. Si bien, es difícil encontrar alguien cuya profesión sea el Carnaval, no es tan complicado encontrar distintos profesionales en las artes empleadas y desarrolladas por nuestras agrupaciones, y de paso aficionados al Carnaval, algo que en Cádiz no es muy complicado .

No quiero decir con esto que todos los años el jurado haya mostrado las carencias que parece que ha mostrado el de 2009, simplemente, cada uno hace lo que puede. No dudo de la honestidad de todo el que se pone en el palco tornavoz principal, si así fuera, me costaría muchísimo trabajo volver a concursar.

Pero, a pesar de lo que he comentado en el párrafo anterior, si dudo de la capacidad de algunos para valorar la originalidad y calidad musical, la dificultad de lo bien trabajado (no por ello menos sencillo a la hora de cantar), para apreciar las patadas que muchísimos dan al diccionario con variaciones de persona, con géneros cambiados, con acentos forzados por la melodía….Todo ello amparado en el "habla de Cádiz", algo absurdo, el habla de Cádiz no se debe utilizar como excusa para compensar nuestras carencias gramaticales. Dudo además de la capacidad del jurado para evadirse de estilos y gustos, y puntuar un repertorio al completo (los cuplés deben tenerse en cuenta en las comparsas si verdaderamente existe tanta igualdad). Lo de sonar a Cádiz, o ver si se repiten o no, se puede valorar sin necesidad de haber salido en Carnaval, es más, en algunos casos es contraproducente.

En una fiesta cada vez más profesional, nos olvidamos de un aspecto importante y necesario. Probablemente, los miembros del jurado se han esforzado en hacerlo lo mejor posible; yo, cada vez que cocino pongo todo mi empeño, pero al final termino llamando a algún restaurante, así voy sobre seguro. Puede que todo esto sea una quimera, no lo sé, pero merece la pena pararnos a pensarlo, y quitarnos el complejo de que sólo hablamos de esto los que perdemos. Eso no es un complejo, es una realidad, al que le va bien así, no verá motivos para el cambio, o si, otra cosa es que lo exprese públicamente.

Me permito una última licencia, y que no es otra que felicitar a un grupo profesional en cuanto a su capacidad de esfuerzo y afición por el Carnaval, apoyado y guiado por un director al que espero seguir ligado al menos, hasta que el jurado sea profesional. Un abrazo.