Antonio Luna Velasco, a punto de cumplir las bodas de plata como churrero, oficio en el que lo inició su padre cuando tenía 16 años, reconocido aficionado al Carnaval, dice que se indigna con tantos gritos de "¡Campeones! ¡Campeones!" desde la primera clasificatoria del concurso de Falla e ironiza afirmando que "así no van a existir segundos premios". También le indigna el frío que hace en el Teatro Falla, tanto en los camerinos como en la sala, a lo que dice que se une el recorte en el número de botellas de Tío Pepe que se le dan a cada agrupación, que han pasado de seis a tres por la crisis. Otro tema relacionado con la fiesta que le indigna es la presencia masiva de vagamundos que se concentran estos días junto a Correos, que indica que forman un circo ambulante, continuamente pidiendo dinero o tabaco y que espantan a la clientela de los puestos. Que vienen atraídos por el Hotel La Caleta, el que tiene más estrellas del mundo en una noche clara. Antonio presume de que su puesto es el antiguo de Carmen Pecci 'La Guapa', al que alude el tango 'De la Habana llegó un fulano', del coro 'Los Pintores' (1949), de Ramón Cebada, que dice "... los tejeringos de nuestra tierra / y las tortillas que hace La Guapa / le dieron bríos, valor y fuerza / y algo más gordo ya se notaba...". Las tortilla de camarones las vuelve a hacer los dos fines de semana del Carnaval, incluyendo el primer lunes, que es hoy, y el día del Carnaval Chiquito. Algunas agrupaciones, entre las que cita la de Kike Remolino, acuden cada Lunes de Carnaval a cantarle su repertorio en las primeras horas de la tarde, cuando resurgen las famosas tortillas de La Guapa.