Y el título del artículo no es por el fallo del jurado y los premios del Concurso. Es por la falta de coherencia de los autores del Carnaval, que en algunos casos es de vergüenza. Una estafa. Porque cantar en el Teatro Falla y en Carnaval, se canta lo que quiera, pero algún gesto que confirme lo escrito o cantado sí que se echa en falta. Mi decepción viene por la ausencia, en la mañana de ayer, en la concentración de los sindicatos contra la reforma laboral de autores, componentes y demás integrantes de vanguardia de la fiesta gaditana. Alguno habría, pero los menos.

Y que conste que no critico los posicionamientos políticos de cada uno y no seré yo quién diga lo que tiene que hacer nadie. Pero sí es verdad que me parece chocante que, con todo lo que se le ha cantado a la crisis, al paro, a luchar, a revelarse... no hubiera ninguno de esos autores que han escrito esas letras en las puertas de la Subdelegación del Gobierno. Con todos los peros que la convocatoria tenía para la gente del Carnaval. Pero no es excusa.

Porque está claro que lo del Falla es un concurso y que cada uno juega sus armas. Se concursa. Se hace estrategia. Se canta lo que interesa en cada momento. Y ése es el problema, que cada vez todo tiene menos de verdad.

Cada vez las letras son menos ciertas y se cantan (en su mayoría siempre, que sé que toda generalización acarrea injusticia) por el efecto que pueda tener en el público y lo que vaya a valer para que los miembros del jurado puntúen mejor. Es lícito, pero cada vez es menos verdad lo que se canta sobre las tablas del coliseo gaditano.

Cada vez me creo menos lo que escucho, salvo honrosas excepciones. Los autores apenas se mojan, apenas dicen lo que piensan, y cantan lo que piensan que deben de cantar para que el público se ponga en pie (cosa nada difícil en estos tiempos en los que cada noche se escucha en el Teatro "Campeones, campeones"). Casi nadie se moja por miedo a lo que pueda pensar el jurado, no vaya a ser que le moleste (y ahora me mojo yo, y creo que aquí a mi vecino de página una de esas letras mostrando sus pensamientos le ha costado este año estar en la Gran Final).

Eso del topicazo del "periodismo cantado" hay que enterrarlo. El Carnaval cada vez es más falso. Y lo que es peor, se está siendo mezquino con la herencia de aquellos que lucharon contra la censura y el lápiz rojo.

Porque lo de ahora es autocensura. Los autores se calla por un premio. Qué pena, joé.