Si hay alguien que aglutina las señas de identidad del Cádiz ese es Álvaro García. Esfuerzo, velocidad, humildad, con los pies bien asentados sobre la tierra, sin echar las campanas al vuelo en ningún momento, sin desviase un milímetro del objetivo de la permanencia pese a la sexta posición de la que advierte que puede resultar engañosa porque el descenso sólo está cinco puntos por debajo. El extremo utrerano firmó un partidazo contra el Zaragoza y dejó una imagen para el recuerdo con aquella galopada que dejó sin respuesta a su oponente. Reconoce que vive uno de los momentos más dulces de su carrera y resalta la labor del conjunto.

-¿Qué sintió cuando, al retirarse del terreno de juego en el partido contra el Zaragoza, la afición le despidió con una fuerte ovación como premio a su buena actuación?

-Sentí una satisfacción muy grande porque llevo un temporada y media en el Cádiz y es un orgullo recibir ese reconocimiento en casa. La afición suele mostrarme su apoyo y sólo tengo palabras de agradecimiento.

-¿Hizo Álvaro García de Bale y Fran -lateral del Zaragoza- de Bartra en la jugada del primer gol contra el conjunto aragonés?

-Uff! Me queda mucho para poder llegar a parecerme a Bale, aunque la jugada en parte fue parecida porque el defensa me intentó agarrar y pude escaparme rápido por velocidad. En la acción de Bale él empieza la jugada y la termina marcando el gol, y en mi caso no sucedió así porque yo no marqué.

-Su velocidad es explosiva. ¿Qué marca tiene en los 100 metros lisos?

-La verdad es que no tengo ni idea. Nunca he realizado esa prueba. No es algo que sea importante para mí. No he sentido curiosidad por saberlo.

-Se le ve pletórico sobre el césped. ¿Se encuentra en el mejor momento de su carrera?

-El play-off de ascenso resultó bastante bueno pero la categoría en la que estamos ahora es más exigente por la entidad de los rivales y sí, quizás sea de los mejores momentos.

-¿En qué ha cambiado aquel chaval que salió de Utrera hace cuatro años?

-He cambiado mucho. Soy una persona mucho más madura si me comparo con esa etapa. Salí de Utrera con 19 o 20 años y he mejorado en muchas cosas, como por ejemplo en los hábitos alimenticios, en saber cuidarme en los entrenamientos, en cuidar mi cuerpo con vistas a la competición. Cuando estuve en el Racing de Santander viví la mala experiencia de las lesiones, aunque eso me sirvió para conocer mejor mi cuerpo. Cuando noto algo lo detecto enseguida y eso es un factor favorable para un futbolista.

-Dio el salto de Primera Andaluza a Primera División -jugó algunos partidos en el Granada- en menos de un año. ¿No fue un cambio demasiado brusco?

-Es cierto. Todo fue demasiado rápido porque entonces yo era muy joven y dar ese salto así, en tan poco tiempo sin ni siquiera haber pasado por Tercera y Segunda, fue un giro drástico. En Primera División hay otro nivel para jugar en esa categoría y hay que estar preparado en todos los aspectos, físicamente y de cabeza. Noté mucho el cambio. Después jugué con el Racing en Segunda y me ayudó para coger experiencia.

-Conoció la Primera de manera fugaz. ¿Su reto es jugar en la máxima categoría con mayor estabilidad?

-Por supuesto. Como cualquier futbolista, el sueño desde que eres un niño es llegar a jugar en Primera División y afianzarte. Ojalá lo consiga. Me encuentro bien, con muchas ganas de jugar y el tiempo dirá hasta dónde llego. Espero que me respeten las lesiones.

-La pasada temporada, en la división de bronce, pasó de ser un jugador de segunda partes a convertirse en un hombre fundamental en la fase de ascenso y ahora, en Segunda A, es titular. ¿Cómo se puede explicar ese cambio?

-A nadie le gusta ser considerado como un revulsivo de segundas partes. Pero hay que amoldarse a todas las situaciones y trabajar a tope como el primer día. Con mucho trabajo y sin perder nunca las ganas puedes conseguir ganarte el puesto, aunque cuando lo logras hay seguir fuerte porque los compañeros aprietan. Hay mucha competencia y nunca se puede caer en la relajación.

-¿Cuál es la clave para que el Cádiz haya pasado en poco tiempo de estar en la zona de descenso a ocupar la sexta posición en promoción de ascenso?

-Los nuevos compañeros que han llegado esta temporada se han adaptado bastante bien a lo que el míster quiere. Todo tiene su tiempo de adaptación. Al principio cuesta pero en el equipo vamos todos a una, sabemos que hay que correr mucho, tener humildad y ayudarnos unos a otros en todo momento.

-A este ritmo de producción de puntos, ¿piensa que el Cádiz podrá cumplir pronto el objetivo de la permanencia?

-Está claro que debemos seguir como hasta ahora, pero no podemos olvidar que ahora mismo sólo estamos cinco puntos por encima del descenso. Si perdemos dos partidos seguidos nos metemos abajo. Está todo muy igualado. Tenemos que continuar con la misma mentalidad y nunca olvidar quiénes somos y de dónde venimos.

-¿Quien piense otra cosa que no sea la salvación se equivoca?

-La gente tiene derecho a pensar lo que quiera, incluso que podemos ascender. Lo importante para nosotros es que el equipo esté mentalizado y centrado en el objetivo de la permanencia. Todo lo que sea soñar es un síntoma de que las cosas van bien.

-Hablaba antes de la igualdad que reina en Segunda División A. Hay un grupo de equipos entre los aspirantes al ascenso pero, ¿cuáles son, a su juicio, los candidatos al descenso?

-Para el descenso no veo que haya candidatos debido a esa igualdad. Esto es un camino muy largo. Estamos cerca del descenso a pesar de donde estamos en la clasificación. Si ganas estás arriba y si pierdes está abajo. Esto puede cambiar mucho y debemos seguir fuertes en los entrenamientos y en los partidos.

-¿Qué aspectos debe mejorar el equipo?

-Siempre hay margen para mejorar. No sabría decir, lo que sí es importante es hacer bien las cosas que sabemos hacer y no confiarnos con nadie en ningún momento, no perder de vista que acabamos de ascender y debemos tener la misma mentalidad.

-¿Y en qué debe mejorar Álvaro García como futbolista?

-Hay muchas cosas por mejorar, seguro que hay muchas, sobre todo acumular más experiencia, tener la cabeza fría en momentos difíciles y mejorar físicamente, que seguro que también hay margen de mejora.

-¿Cuál es el límite del Cádiz esta temporada?

-No hay que ponerse límites. Hay que trabajar día a día, tenemos claro cuál es nuestro objetivo y, por supuesto, saber lo que hay que hacer en cada partido. Hay que ir paso a paso hacia la permanencia e insisto en no hay que olvidar de dónde venimos.

-Si en el mercado de invierno llegase una oferta por Álvaro García. ¿Se plantearía su salida a otro club a mitad de temporada?

-No pienso en esa posibilidad. Estoy centrado en mi trabajo y en la misión que todos tenemos encomendada de mantener al equipo en Segunda A. Tengo cuatro años de contrato por delante y no pienso en nada más que eso. Estoy muy contento en el Cádiz. Estoy casi en mi casa.

-¿Hay algún jugador que sea una referencia para usted?

-Me fijo mucho en los futbolistas que juegan por las bandas, en los extremos, pero no tengo una referencia concreta.

-Por lo que comenta se siente más cómodo en la banda que por dentro.

-Por dentro también me encuentro bien. Los partidos de play-off jugué de mediapunta fuera de casa y cuando era juvenil también lo hice en esa posición. Es diferente pero me amoldo. En la parte de arriba me da igual en qué posición juegue.

-¿Dar el pase de gol satisface tanto como marcarlo?

-Sin duda que sí. Y más y en mi posición, es lo que un extremo debe hacer, asistir a un compañero. A todo el mundo le gusta hacer gol, pero me siento igual de bien si el que lo marca es un compañero.

-¿Es consciente de que ahora será un jugador más vigilado por los contrarios?

-En Segunda hay muchos ojos, además dan todos los partidos por televisión. Todos los rivales te conocen bien y, de la misma manera que vemos a los demás equipos, los otros también nuestras virtudes y defectos.

-El reto más inmediato debe ser terminar bien el año.

-Tenemos dos partidos bonitos. Primero contra un rival histórico como es el Córdoba. Vamos a su estadio con la misma ilusión del primer día y sabiendo que será difícil. El Sevilla Atlético es muy buen equipo que está arriba con grandes jugadores.

-Confiese, ¿quién es más rápido, Salvi o usted?

-Ja, ja, ja. Nunca lo hemos comprobado pero los dos somos rápidos. La rapidez es una de las virtudes que tratamos de explotar como equipo. Tenemos velocidad en las bandas. No sólo Salvi y yo, también son muy rápidos Nico Hidalgo y Aior.