¿En qué se parecen el entrenador del Cádiz, Alberto Monteagudo, y su homólogo en el Real Madrid, José Mourinho? En que los dos técnicos se han quedado sin lateral izquierdo. El portugués se las ve y las desea para suplir las ausencias de Marcelo y Fabio Coentrao, dos bajas de mayor duración de las que sufre el míster cadista, al que sólo le afecta la situación el próximo fin de semana.

Y es que Monteagudo no podrá contar el domingo ni con Bermúdez, que será sancionado por su expuslión, ni con con Tomás, de baja varias semanas y que tampoco trabajó ayer con sus compañeros. No llegará a tiempo.

Las bajas en el costado izquierdo de la defensa obliga al preparador del Cádiz a buscar una solución de urgencia. Con Moke y Aitor Núñez como únicos laterales disponibles -el linense Francis todavía tiene para largo-, Monteagudo debe decidir en qué banda ubicada a cada uno. No sería extraño que el francés pasara a la izquierda de la zaga, donde ya jugó la pasada campaña en el duelo de vuelta de la fase de ascenso contra el Albacete -lo hizo durante un buen rato y con buena nota-. De esa manera, Aitor Núñez entraría en el once titular en la zona derecha de la defensa, aunque podría ocurrir lo contrario y que ambos intercambiaran las posiciones.

"Ojalá tenga la ocasión de jugar porque tengo muchas ganas de ayudar y de regresar al equipo", aseguró ayer Aitor Núñez en El Rosal. El lateral confesó no tener tiene problemas por jugar en una banda u otra. "No me preocupa. Estoy sin miedo y con ganas de aportar".

El ex del Tenerife y Rayo Vallecano recordó que "salió del equipo tras el penalti en San Fernando, pero antes jugué desde el principio en Liga y Copa. Luego me ha costado entrar, pero tengo muchas ganas", insistió antes de añadir que "tenemos ganas de revancha".