Jon Ander Garrido es uno de los futbolistas del Cádiz con un peso específico en el esquema de juego de Álvaro Cervera. Su capacidad pulmonar, su aptitud en la labores de destrucción del juego del equipo contrario en el centro de campo, su inestimable colaboración con la defensa y su rigor táctico le convierten en uno de los habituales titulares.

El vizcaíno sabe mejor que nadie el equipo amarillo no atraviesa su mejor momento con la losa que supone llevar más de un mes si un triunfo en el campeonato de Liga, pero está convencido que la dinámica no tardará en cambiar. El medio transmitió ayer el deseo de toda la plantilla de regresar cuanto antes a la senda de la victoria. "Queremos conseguir un buen resultado en Huesca para que nos dé fuerzas en el plano anímico y nos ponga donde debemos estar", indicó en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva de El Rosal.

El medio afirmó que "hemos tenido muchas lesiones" y, a su juicio, "deberíamos poseer algún punto más de los que tenemos". Como ejemplos puso los partidos más recientes. "Perdimos contra el Osasuna cuando no merecimos perder", y frente a la Cultural Leonesa bajamos un poco el ritmo en la segunda parte después de correr mucho en la primera y nos empataron".

Garrido se entrenó con normalidad después de parar un poco el día anterior por molestias, aunque dijo que "somos muchos y cualquiera puede jugar. Tenemos que dar todos un paso adelante, pero en realidad es algo más relacionado con el aspecto anímico. Debemos seguir con la línea del míster. Cuando llegue una victoria irá mejorando el juego".

Sobre la visita al Huesca, señaló que "todos los campos son complicados. El rival está en una buena dinámica, pero iremos a ganar. Melero está a un buen nivel, iremos a hacer un buen partido para que no estén a su mejor nivel".