El camino hacia el ascenso comienza cuesta arriba. Un Cádiz muy espeso lo pasó mal y acabó casi celebrando el empate a cero ante el Hospitalet, que mostró en Carranza sus credenciales a estar en Segunda División la próxima temporada. Ariday fue una pesadilla para la zaga del conjunto amarillo, que al menos mantiene intactas sus opciones de clasificación pensando en la vuelta. Con dominio pero sin pegada, los amarillos se aferran al logro de mantener su puerta a cero como principal baza en su visita al Municipal Freixa Llarga de dentro de siete días. El primer match-ball espera. 

Ambos equipos comenzaron tanteándose, el Cádiz algo frío y el Hospitalet encomendado a la verticalidad de Ariday. El canario metió el miedo en el cuerpo a los amarillos con sus fenomenales arrancadas y una jugada individual suya dio lugar a la primera ocasión seria para los visitantes ya en el minuto 22, un lanzamiento de Provencio que se marchó alto tras tocar en un defensa. Los de Antonio Calderón sufrían cierta congoja y no encontraban su juego ante un Hospi cada vez más cómodo y mejor plantado sobre el césped. Hasta el público parecía contagiado de ese miedo y apenas si se les escuchaba.

La amenaza se materializó en dos serios avisos en jugadas casi consecutivas protagonizadas por Ariday y David Haro. En el 35 el canario –una pesadilla para la zaga cadista- envió un potente disparo desde la frontal que sacó en dos tiempos Aragoneses y dos minutos más tarde fue el 9 de los catalanes el que recortó a su par dentro del área y sóltó un latigazo que repelió con muchos apuros el ex del Tenerife. La réplica amarilla fue un cabezazo alto de Airam a pase de Migue García en una de las pocas jugadas que los de Calderón pudieron acabar en este primer periodo. Las sensaciones, al término de la primera parte, no eran nada buenas para los de casa.

La segunda parte comenzó con un cambio obligado en el Cádiz, entró Kike López por Josete para ocupar una posición nada habitual para él, el lateral izquierdo. Antes, Ariday había vuelto a dar muestras de su calidad esta vez con un lanzamiento de falta que rechazó Aragoneses. En el 51 llegó, por fin, una ocasión para los de Calderón tras un buen pase de cabeza de Airam para Dioni al que el malagueño no llegó por un pelo. Había partido y la afición, por fin, se hizo notar en ayuda de un equipo que no lo estaba pasando bien sobre el césped.

El juego se afeó con el paso de los minutos y para colmo los amarillos perdieron a Garrido, lesionado. Los de Kiko Ramírez, por su parte, vieron la oportunidad de hacer sangre y el técnico introdujo a Iván Salvador, habitual en la punta de ataque, en lugar de Peque, un lateral reconvertido hoy a interior. Los cadistas, por su parte, seguían espesos y cada vez más imprecisos en el pase ante un Hospitalet superior en todas las facetas del juego, aunque los locales casi se llevan la victoria en el descuento en una gran ocasión con Airam como protagonista. El balón, despejado, y Craviotto, inédito. 

El susto protagonizado por Viale, que quedó momentáneamente inconsciente tras un choque con el delantero tinerfeño del Cádiz, terminó de enfriar los ánimos de dos equipos que habían dedicado noventa minutos a tomarse medidas pensando en la vuelta de dentro de siete días. El Municipal Freixa Llarga dictará sentencia. 

FICHA TÉCNICA

Cádiz CF: Aragoneses, Ceballos, Fran Pérez, Tena, Josete (Kike López, 47'), Garrido (Mikel Martins, 71'), Luque, Juan Villar (Perico, 62'), Migue García, Dioni y Airam.

CE L’Hospitalet: Craviotto, Hammouch, Valentín, Viale (Manel, 88'), Moyano, Lucas Viale, Peque (Iván Salvador, 66'), Pol, David Haro, Ariday (Pirulo, 81') y Provencio.

Árbitro: Ortiz Arias (madrileño). Mostró amarillas a Tena, Luque y Garrido por los locales y a Ariday y Peque por los visitantes.

Incidencias: Partido disputado en el estadio Ramón de Carranza ante unos 12.000 espectadores.