Los primeros tres fichajes del Cádiz 2017/18 fueron presentados ayer a mediodía en la sala de prensa del estadio Ramón de Carranza, un acto en el que el director deportivo, Juan Carlos Cordero, acompañó a los nuevos futbolistas del equipo y dio mínimas pistas de lo que está por venir en el mercado de verano.

Los delanteros Moha Traoré, que según Cordero viene para formar parte de la primera plantilla pese a su edad, y el isleño David Barral, que se mostró orgulloso de jugar por fin en el conjunto de la Tacita de Plata y afronta el reto de sustituir a Dani Güiza como referente en ataque y por su condición de gaditano, así como el central argentino Marcos Mauro, que alabó las virtudes del cuadro amarillo, ofrecieron sus primeras palabras como integrantes del plantel de Álvaro Cervera antes de posar con la bufanda y la elástica cadista.

El maliense Traoré, del que Cordero también señaló que "hay puestas muchas esperanzas porque es un tipo de jugador difícil de encontrar en el mercado", dijo estar "muy ilusionado" y prometió "trabajo y esfuerzo para aprovechar esta oportunidad".

Por su parte, sobre Barral, el que más tiempo atendió las preguntas de los medios, indicó que "tenía muchas ganas de triunfar en el Cádiz", por lo que no dudó "ni un instante la oferta". El isleño afirmó que es "uno de los retos más importantes de mi carrera". "Al ser de la tierra, jugar en mi equipo es lo máximo. Venía a Carranza a ver fútbol y ahora quiero triunfar aquí", apuntó, confesando que sabe que tendrá que "sudar mucho".

Por último, Mauro, "un central duro, exigente y ganador en las disputas" a ojos de Cordero, manifestó que su fichaje cobra sentido porque "el Cádiz es un club apetecible en todos los sentidos".