Cádiz CF

Cervera, amenaza para Milosevic

  • El único entrenador que ascendió dos veces al Cádiz es, por ahora, el yugoslavo

  • Vizcaíno podría pisar los talones a Irigoyen y Muñoz, presidentes que subieron en tres oportunidades

El Cádiz continúa esta noche la pelea por encadenar el que sería su segundo ascenso consecutivo, algo que solo ha ocurrido en una oportunidad a lo largo de la historia del club. Cabe aclarar que el valor cualitativo de lo que puede ocurrir dentro de unos días, si los amarillos son capaces de eliminar hoy al Tenerife y de hacer lo propio la semana entrante con el Getafe, se antoja infinitamente superior del que se puede conceder al único precedente que existe. Este se remonta a la década de los años 30 del siglo pasado, cuando el conjunto gaditano, por aquel entonces todavía denominado Mirandilla, enganchó dos saltos de categoría seguidos pero de Segunda Regional a Primera Regional (1933/34) y de Primera Regional a Segunda División (1934/35). La diferencia con la situación actual, de Segunda B a Segunda A para de inmediato escalar hasta la cumbre del fútbol español, es indiscutible.

Lo que le está ocurriendo al Cádiz, después del convincente encuentro de ida contra los canarios en el Ramón de Carranza, permite albergar fundadas esperanzas de que se acabe cumpliendo el sueño de su fidelísima afición. La culminación de la hazaña supondría el segundo ascenso personal tanto para el entrenador como para el presidente desde que desempeñan sus respectivos cargos en el club gaditano.

Un repaso a los nombres de los antecesores de Álvaro Cervera y Manuel Vizcaíno en la relación de los 13 saltos de categoría protagonizados por el Cádiz hasta el día de hoy desvela que el técnico nacido en Guinea Ecuatorial se halla en condiciones de igualar el récord en lo que se refiere a los técnicos que han llevado a los amarillos a subir de división. Solo hay uno que haya repetido de momento, el yugoslavo Dragoljub Milosevic. Su doblete se produjo en el breve espacio de tres temporadas, brincando a Primera tanto en 1981 como en 1983, en ambas ocasiones con el Elche como adversario en la última jornada. Curiosamente, pese al descenso de 1982 se siguió confiando en él para devolver al cuadro de la Tacita junto a los grandes del país.

Hay que aclarar que Kinké, artífice del primer ascenso, estuvo cerca de acumular otro una campaña más tarde (1934/35) pero se quedó con la miel en los labios. Se acabó subiendo a Segunda pero en un partido de repesca contra el Onuba montado ya en el mes de septiembre para cubrir una vacante. Entonces ya no estaba en el banquillo Kinké sino José A. Rey, que le había relevado de cara al curso 1935/36.

En el capítulo presidencial, Vizcaíno se encuentra en una situación similar aunque no idéntica a la de Álvaro Cervera. En su caso no tiene al alcance a sus predecesores en el cargo con mejor balance, ya que tanto Manuel de Irigoyen como Antonio Muñoz llegaron a coleccionar tres ascensos de categoría durante sus respectivas etapas al frente de la entidad. Eso sí, el dirigente sevillano pasaría a pisarles los talones con un par de éxitos en un breve periodo en el sillón presidencial. De los demás, ninguno saboreó la gloria más de una vez.

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