El inminente fichaje de Lucas Bijker, el lateral zurdo que el director deportivo del Cádiz, Juan Carlos Cordero, ha atado a la espera de que pueda confirmarse su contratación una vez que el presidente, Manuel Vizcaíno, y el consejero delegado, Quique Pina, resuelvan las diferencias que están afectando a la normal marcha de la entidad, supondrá un importante refuerzo en una demarcación que cuenta en estos momentos con dos futbolistas a las órdenes de Álvaro Cervera.

Nacido el 4 de marzo de 1993 en Sao Paulo (Brasil), Bijker cuenta con la nacionalidad holandesa y su trayectoria deportiva incluye su paso por el FVC en la etapa juvenil, el Cambuur Leeuwarden y el Heerenveen, en el que ha militado las últimas dos campañas. Internacional sub'21 con Holanda, Lucas representa una importante competencia para Brian Olivan, valor al alza del plantel al que se pretende exigir al máximo poniéndole el listón bien alto. El pasado curso el catalán compartió puesto con el onubense Luis Ruiz, que abandonó la disciplina cadista al término del ejercicio, y ahora parece los rectores no estaban por la labor de dejarle a Tomás como único compañero para pugnar por la posición. El canterano tiene todas las papeletas para volver a marcharse cedido.

Aunque el fichaje no es oficial, lo cierto es que Lucas Bijker se unió a los integrantes del plantel el pasado jueves en la concentración en La Manga del Mar Menor y ayer se dejó ver durante la sesión de entrenamiento matinal. Cuando Vizcaíno y Pina, Pina y Vizcaíno, tengan a bien hacer las cosas como deben, cuanto antes mejor, el defensa holandés se convertirá en el sexto refuerzo de la pretemporada, tras el aterrizaje del central argentino Marcos Mauro, el extremo y mediapunta Alberto Perea y los delanteros Moha Traoré, David Barral y Dani Romera.

En un mercado tan variable como el futbolístico, la prestigiosa web alemana Transfermarkt otorga a Bijker un valor de 1.250.000 euros, lo que le situaría como el segundo jugador más valioso de la plantilla del Cádiz, sólo por detrás de Álvaro García, cuyo valor alcanza los dos millones, y justo por delante de Abdullah, que vale 800.000 euros.

Al margen de esta operación atada y más que atada por Cordero pero pendiente de la rúbrica, el director deportivo continúa trabajando con el condicionante, en absoluto menor, que supone no poder cerrar ninguna contratación mientras los responsables de la sociedad no sellen la paz. En este sentido, aunque el director deportivo ni afirma ni niega, a nadie escapa que centra sus esfuerzos en cubrir las necesidades más obvias para Cervera, que en principio apunta a la portería, una vez que Jesús Fernández se ha ido a la Cultural Leonesa, el centro de la defensa, tras ser traspasado Aridane a Osasuna, y el lateral derecho, al no continuar Iván Malón.

En estos momentos, Alberto Cifuentes es el único guardameta de la primera plantilla, ya que David Gil y Álex Lázaro trabajan con el grupo y se han trasladado a La Manga del Mar Menor pero actuarán en Liga con el filial de Tercera. Por su parte, para el centro de la zaga los mimbres disponibles son Servando, Sankaré y el recién fichado Marcos Mauro, por lo que en algún amistoso incluso ha actuado Eddy Silvestre como improvisado central, mientras que en el lateral derecho se encuentra solo Carpio.