El gobierno municipal espera cerrar su mandato en 2019 con la reordenación de todo el espacio portuario y su integración en la ciudad ya cerrada, contando entonces ya con la nueva planificación perfectamente definida y con una planificación clara de lo que se va a hacer y quién lo va a hacer, tanto desde el sector público como desde el privado, lo que permitirá iniciar todo el proceso de urbanización tras las elecciones municipales que se celebrarán a mediados de 2019.

Tras varios años de conversaciones infructuosas, planteamientos divergentes y parones en todo el proceso administrativo, la Autoridad Portuaria, el Ayuntamiento de Cádiz y la Universidad de Cádiz han puesto en marcha el proceso de confección del plan de integración del puerto en la ciudad cuya redacción deberá estar culminada en un plazo de unos ocho meses. Después se necesitarán unos cuantos más para realizar toda la tramitación administrativa y repartir la tarea a todos los colectivos implicados, lo que supone agotar los dos años y medio que quedan para los próximos comicios locales. Todo ello teniendo en cuenta que la reurbanización de todo este espacio está directamente relacionada con la puesta en uso de la nueva terminal de contenedores, pues allí se trasladará todo el tráfico de mercancías que hoy utiliza el muelle Reina Sofía.

Este espacio supone un terreno de unos 300.000 metros cuadrados. Mucho suelo para una ciudad que apenas dispone de un término de 13 kilómetros cuadrados, playas y parque natural incluidos. Es, por ello, la operación de mayor calado ciudadano que se quiere emprender en la capital y para cuyo éxito, después de tantas decepciones, es prioritario contar con el apoyo del Ayuntamiento, el gobierno andaluz y el gobierno central.

Y junto a ellos, los colectivos ciudadanos, con los que el Ayuntamiento abrirá un debate público para conocer sus propuestas y opiniones sobre los que se puede y se debe hacer en esta zona. "Para el equipo de gobierno es esencial este proyecto porque siempre hemos tenido claro que las etapas de mayor prosperidad de Cádiz han llegado a través del mar. Por ello es fundamental que la ciudadanía se meta en el proyecto y que éste, también, esté directamente relacionado con el conjunto de la Bahía", afirma a este diario el teniente de alcalde de Urbanismo, Martín Vila.

Trabaja el Ayuntamiento, y con él sus otros socios institucionales en este proyecto, sobre tres pilares. Uno es la participación activa de entes públicos y privados; otro es tener claro lo que se quiere hacer, cómo se va a hacer y cómo se puede pagar; y el tercero se plantea sobre la necesidad de evitar duplicidades en la ciudad y que todo lo que se haga sirva para crear empleo, no para moverlo de un lugar a otro.

En el caso de la claridad de conceptos, Martín Vila pone como ejemplo el edificio de la Ciudad de Mar, construido hace un cuarto de siglo y siempre vacío, pues nació sin un uso definido. "Es el ejemplo de lo que no queremos hacer", afirma Vila. Así, todo aquello que se vaya a levantar "debe tener un uso bien definido. Hay que romper con el modelo anterior de construir grandes equipamientos que han acabado vacíos. Hay que evitar repetir estos errores. Vale que se puedan construir edificios icónicos, pero siempre con una finalidad clara antes de empezar las obras".

Unido a este concepto de urbanización está tener claro el qué se va a instalar en estos 300.000 metros cuadrados de suelo. Vila lo advierte: la cuestión no es trasladar a este nuevo espacio urbano equipamientos ya existentes en otros puntos de la ciudad. Hay que plantear actuaciones que creen empleo y sean complementarias a lo que ya funciona en la capital. "Se puede tener una vocación de ocio, comercial o también hotelera, siempre que tenga este carácter complementario y si hay demanda ciudadana para ello. Pero también se puede contar con una oferta náutica conectada con Puerto Elcano, o incluso la creación de un pequeño astillero para veleros. O proponer un Museo Oceanográfico. Todo con mucha cautela y siendo honestos con la ciudadanía"

Todos estos proyectos, o por lo menos buena parte de ellos, tendrán una clara visión de Bahía. Este concepto metropolitano junto a la unión de todas las administraciones públicas y la apertura a la sociedad de cara a definir el diseño de la operación debería de favorecer, destaca el edil de Urbanismo, la consecución de fondos europeos de cara a un desarrollo más ágil en el tiempo.

Junto a ello, defiende el Ayuntamiento la continuidad de los usos portuarios y su fortalecimiento en el espacio que quede ajeno a esta transformación, tanto en cuestión de los cruceros turísticos, cada vez más boyante, como el tráfico de mercancías y el sector pesquero, reclamando para ello las mejoras de las conexiones ferroviarias.