El cuadro conmemorativo de la interseción de la Virgen de La Palma en el maremoto de 1755 desaparecerá temporalmente de su ubicación habitual, en la calle que lleva el nombre de la imagen gloriosa. La demolición de la finca contigua al punto en el que se sitúa el cuadro y la construcción de nuevas viviendas llevaron a la cofradía de La Palma a mostrar ante el Ayuntamiento su preocupación por los posibles daños que estas obras podrían ocasionar al cuadro. Después de la visita realizada ayer por técnicos de Mantenimiento Urbano a la zona, se ha decidido proceder a retirarlo hasta que concluyan las obras.

En ese tiempo, el cuadro se expondrá en la capilla de los titulares de la cofradía de penitencia, en el interior de la iglesia de La Palma, según tiene previsto la cofradía. Posteriormente, cuando la nueva finca ya esté construida, la intención es restaurar tanto el cuadro como la lápida conmemorativa, y volver a colocarlos en el mismo lugar.

Además, la hermandad pretende llevar a cabo diversas mejoras para proteger este retablo conmemorativo del maremoto, con el adecentamiento de su entorno "para que realmente tenga el valor y la relevancia que debe tener en la calle de La Palma y no pase desapercibido con sombrillas o carteles de tapas", manifestaba ayer el hermano mayor de La Palma, Francisco Javier Lucero.

Otro de los mosaicos cofrades repartidos por la ciudad, el que levantó la cofradía del Carmen en la fachada lateral del templo con motivo de la coronación canónica de la Virgen el pasado año, va a cambiar su ubicación. Después de que la Junta de Andalucía obligara a la hermandad a retirarlo, ya que la iglesia es un Bien de Interés Cultural y la hermandad no disponía de la autorización de Cultura para instalarlo, la administración autonómica ha autorizado ahora a que el mosaico se coloque en el edificio de los carmelitas anexo al templo.

Este mosaico no podrá colocarse en estas fechas, ya que la hermandad afrontará antes la culminación de la obra, con el añadido del dosel y otros elementos.