Gastronomía José Carlos Capel: “Lo que nos une a los españoles es la tortilla de patatas y El Corte Inglés”

marítimas

Un grande entre los grandes

  • El puerto de Cádiz se esmera por que la reestiba del 'MSC Eloane' termine lo antes posible y la operación se culmine con todo éxito

¿quién le iba a decir a los responsables del puerto de Cádiz y a los gestores de Concasa que iba a ser un Triple E, un megabuque, un gigante entre los gigantes del mar, el que iba a estrenar la nueva terminal de contenedores gaditana?. De hecho, si se hubiera contemplado esta posibilidad en alguno de los varios proyectos enviados a Europa para convencer a la burocracia de la UE sobre la viabilidad de este proyecto, algún periodista o crítico del sector habría tachado esto de brindis al sol o incluso de tomadura de pelo.

Pero por una vez, y sin que sirva de precedente, la mala fortuna sufrida por el MSC Eloane a causa de un golpe de mar frente a la Costa da Morte, en A Coruña, se ha tornado en buena noticia para el puerto de Cádiz, que veía entrar por su bocana a este gigantesco barco de 400 metros de eslora el miércoles pasado. Desde entonces, todos los actores a los que se ha requerido intervención han puesto toda la carne en el asador para que la operación de reestiba, es decir de descarga, recolocación y reparación de los entre 50 y 60 contenedores afectados por este incidente salga de 10.

De hecho, a una operación calificada como de "muy peligrosa", hay que sumar las prisas que impone el hecho de que MSC no puede permitirse tener este barco cargado y parado durante demasiado tiempo y el tiento que hace falta para que toda esta operativa salga con éxito y sin el más mínimo incidente ni accidente.

Entre el miércoles y el jueves se procedió a analizar la situación y a contratar la intervención de tres enormes grúas, dos de mil toneladas y una de 1.300 toneladas, para que lleven a cabo la delicada manipulación de la carga del MSCEloane. De hecho, el jueves tan sólo se tocaron tres contenedores y este viernes se llegaron a bajar del megabuque un total de seis containers, algunos de ellos abiertos y con la carga ya inservible.

Y hablando de la carga, cabe recordar que esta nave de MSC, tras el golpe del Atlántico, tuvo que dejarse en el camino en torno a medio centenar de contenedores que cayeron al agua. Algunos de ellos fueron a parar directamente al fondo del mar y otros quedaron flotando un rato sin demasiadas posibilidades para su rescate. Otros se desprendieron de la cubierta rotos o abiertos, lo que provocó que mucha de la carga quedará flotando en el mar.

Así, algunas playas de la Costa da Morte, en A Coruña, amanecían estos días plagadas de productos que hasta hace poco formaban parte de la carga del Eloane. Leche en polvo, planchas de aluminio, cartuchos de tinta, sofás nuevos y miles de cajetillas de tabaco estropeados ya por el agua. Y tanto es así que el hallazgo motivó que un helicóptero de Aduanas tuviera que sobrevolar la zona para evitar que alguien se hiciera con el cargamento. La mayor concentración de producto se dio en el litoral de Fisterra, Cee y Muxía, en cuyas playas aparecieron, sobre todo, decenas de botes de leche infantil.

Algunos de los contenedores que ahora se descargan en Cádiz, en su nueva terminal de Concasa, están dañados y abiertos, y otros muchos contienen ya mercancía deteriorada por ser mercancía perecedera y quedarse el contenedor que la portaba sin energía eléctrica.

Multitud de operarios y algunos estibadores de Cádiz viven en primer plano esta histórica operativa que aún se afana por saber realmente dónde estuvo el fallo que provocó que este desafortunado golpe de mar acabara con el desplazamiento de la carga del MSC Eloane. Se barajan aún muchas posibilidades tales como que algún contenedor tomado como base no se encontrara en buen estado, pero aún es pronto para hablar de causas. Ahora, tanto MSC como todos los que intervienen en esta operación priorizan la seguridad para que, lo antes posible, el Eloane vuelva a poner rumbo a su próximo destino.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios