Los hechos acaecidos en la calle Buenos Aires en la madrugada de ayer cuentan con un testigo de excepción: un vecino de la finca contigua a la incendiada que a esa hora (las tres de la madrugada) fumaba un cigarro en el balcón. Él -que prefiere no desvelar su identidad- aseguraba ayer a este periódico haber visto a una mujer entrar en Buenos Aires, 14 "como para hacer orín, pensé" y salir poco después. "Se paró en la esquina de Adolfo de Castro y cuando pasó un hombre que alertó del fuego se acercó de nuevo a la casa. Entonces le dije 'has sido tú' y salió corriendo", explicaba este vecino, que cree que "si no le hubiera dicho nada, igual se hubiera quedado allí y la hubieran cogido in fraganti".

Según su testimonio, la mujer tendría "treinta y tantos o cuarenta años" y vestía un traje marrón y zapatos de cuña "de esos de verano".